El secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, ha aclarado públicamente que la indumentaria que vestirán los deportistas en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 responde a un "acuerdo suscrito por el Comité Olímpico Español en el año 2009" y que vincula, además, a Río de Janeiro 2016.
Mientras
la mayoría de los españoles se burlan del nuevo uniforme olímpico de su delegación,
Miguel Cardenal lo defiende con uñas y dientes, pero no porque le guste, sino porque no le queda otra. La selección olímpica española tendrá que 'apechugar' los diseños de Bosco Sports hasta los Juegos Olímpicos de 2016.
"El gobierno ha mantenido reuniones con diseñadores españoles y vamos a intentar hablar con esta firma (la ítalo-rusa Bosco Sports) para que en sucesivas ocasiones cuenten con firmas españolas para recoger más el estilo español". Cardenal respondió así a la réplica del portavoz del Grupo Socialista,
Manuel Pezzi, que criticó el diseño que la marca ítalo-rusa ha elegido para vestir a la delegación española en los Juegos.
"La delegación española va a ir vestida horteramente con un diseño ruso a los que le falta la charretera. Somos la vergüenza de los diseños. Si un alto cargo se hubiera probado este chándal se hubiera negado. Y si se puede que se rectifique. Ni gratis. Son gratis porque son lo peor del diseñador ruso que viste también a Rusia y Ucrania", apuntó Pezzi.
El portavoz de Unión Progreso y Democracia,
Toni Cantó, también metió cizaña diciendo que el diseño "supone un sacrificio estético en la vestimenta de los olímpicos".
Por otra parte, el presidente del COE,
Alejandro Blanco, restó este jueves importancia a la polémica suscitada por el uniforme y recordó que no solo tendrá coste cero sino que, además, aportará financiación.
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