En este sentido, Chávez aseveró que el "Rey es tan jefe de Estado como yo", eso sí, jactándose de la diferencia de que él ha sido elegido democráticamente. "La diferencia es que yo soy electo, tres veces, con un 63% de los votos".
Asimismo, aseguró que no se arrepiente de las palabras dirigidas al ex presidente José María Aznar, al que calificó de "fascista". En la televisión venezolana, Chávez advirtió de que dirá "la verdad delante de reyes, de imperialistas, de Bush; allá los que se molesten".
Por su parte, Aznar, después de ver las imágenes en las que José Luis Rodríguez Zapatero exigía al presidente venezolano respeto hacia su figura, y el Rey le mandaba callar, llamó por teléfono a ambos para agradecerles su gesto. Una reacción muy diferente a la mostrada horas antes por el secretario de Comunicación del PP, Javier Elorriaga, quien criticó a Zapatero por su actitud "pusilánime".
El ex presidente del Gobierno llamó a su sucesor y al Rey Don Juan Carlos, para "darles las gracias" por la defensa que hizo de su persona cuando éste exigió respeto para el ex presidente ante las las críticas del presidente venezolano, Hugo Chávez.
La conversación fue breve, de unos diez minutos, y ésta se produjo después de que Zapatero depositara una ofrenda floral ante el memorial inaugurado la semana pasada para recordar a las víctimas de la dictadura militar argentina y antes de ser recibido por el presidente argentino, Néstor Kirchner, y su esposa, la senadora y presidenta electa Cristina Fernández en la residencia presidencial de Olivos.
En la conversación, el presidente del Gobierno le respondió a Aznar en los siguientes términos: "he actuado de acuerdo a mis principios y al respeto que se merece cualquier persona que sea elegida democráticamente por los ciudadanos para la presidencia de nuestro país".