Josep Antoni Duran i Lleida, presidente de UDC, el socio minoritario de CiU, y secretaro general de dicha federación, ha hablado claro: es partidario de que CiU se implique a fondo en la política española, tanto que aboga por que los nacionalistas moderados asuman carteras ministeriales cuando se dé dicha posibilidad. Incluso Duran asegura que trabajará en esa dirección “aún a expensas de que siga diciendo que es para mi beneficio personal, como ridículamente se tiende a simplificar”.
Duran lo ha dicho en un largo artículo, firmado como secretario general de CiU, en El País. Ha explicado lo que se hablaba en diversos foros y también en este diario, que es partidario de abrir colaboraciones concretas con el gobierno del PSOE a pesar de que en Cataluña los socios del socialismo español, PSC hayan formado un gobierno que les excluye del poder.
Contradice en su artículo la tesis de CDC de convertir la federación en la “casa común del nacionalis mo”. En este sentido aboga para que la coalición mantenga con nitidez su perfil centrista, democrático y social. A pesar de ello no se muestra partidario de acercamientos al PP por la posición de dicho partido en la política antiestatutária y por la presentación de recursos de anticonstitucionalidad a la norma legislativa más importante de Cataluña.
Desde CDC no se ha querido opinar de la toma de posición de Duran. Lo único que se ha dicho es que esa opinión “es conocida”.
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No(
