Por primera vez los invidentes han podido votar de forma completamente autónoma y, por tanto, ejercer su derecho constitucional a mantener el secreto de sufragio. La ONCE y el Ministerio del Interior desarrollaron un 'kit' de voto para aquellos invidentes que lo solicitaron en el plazo establecido, que se prolongó desde el 15 de enero hasta el 11 de febrero.

Miguel Moreno Torbellino, es un invidente de 56 años y gracias a esta iniciativa ha podido, por primera vez, votar sin ayuda de nadie. Según explicó a Madridiario, "ha sido una experiencia estupenda, todo ha ido muy bien y no he tenido ningún problema".
Moreno ejerció su derecho al voto a las 13.15 horas en el colegio tomás Bretón del distrito de Arganzuela (c/ Alejandro Dumas,4). La manera de votar, consiste en un maletín que el votante llevar consigo a una cabina especialmente habilitada para ellos.

Además del pliego de instrucciones, el votante dispone de un sobre pequeño con todo lo necesario para su voto al Congreso y otro más grande para el Senado. El votante solo tiene que encontrar el sobre correspondiente al partido al que quiera votar, extraer la papeleta e introducirla en el sobre del Congreso.
En el Senado, la cosa se complica un poco más. Primer paso: extraer un pliego en el que figuran, en braille, todas las candidaturas al Senado que se hayan presentado en esa provincia, partidos y candidatos incluidos. Segundo paso: extraer una plantilla troquelada y también en braille que contiene, a su vez, la papeleta de las elecciones al Senado.

Tercero: leer con una mano el listado de candidaturas y señalar la casilla correspondiente con ayuda de la plantilla. Se extrae la papeleta, se introduce en el sobre, y a las urnas.
De esta manera, se ha podido conseguir que sean muchos los invidentes que hayan podido votar sin la necesidad de utilizar papeletas electorales en braille, con lo que se preserva su derecho de mantener el voto en secreto.