El primer aparato pesaba 800 gramos, su batería duraba apenas dos horas, era tan grande como un ladrillo de construcción y costaba unos US $ 3,500, todo un lujo para la época.
Desde 1990 nuestro país vive la revolución de la telecomunicación móvil cambiando ritmos de vida y de consumo. Antes de aquel año, el Perú contaba con sólo 500 mil teléfonos fijos a nivel nacional y la instalación de la red para una casa tardaba hasta diez años, elevando astronómicamente el precio de las viviendas que contaban con esta instalación.
El Perú fue uno de los pioneros en Latinoamérica en contar con celulares, incluso tres años antes que aparecieran en España. En la actualidad existen 20 millones de teléfonos en el Perú de los cuales casi 18 millones son celulares activos, repartidos entre cuatro operadoras móviles (Telefónica, Claro, Nextel y Tesam). Hay modelos cada vez más pequeños y precios al escoger. Las marcas que más resaltan son Nokia, Motorota, Sony Ericsson, etc.
En abril se agrego un dígito en la numeración móvil, llegando a nueve, pues esto permitirá preparar los sistemas para que en el 2010 pueda funcionar la portabilidad numérica, por la cual los usuarios podrán mantener su número telefónico, aún si cambian de empresa operadora.