En relación con ETA hay indicadores que nunca fallan. Cuando vimos a Otegi condenando al atentado del 11-M supimos que, contra lo que aseguraba Acebes, su autor no había sido ETA. Ahora corre el rumor de que el diario Gara está preparando las cosas para triplicar su edición de mañana. Creo que es bastante elocuente. Obviamente no sé lo que dirá el comunicado, pero creo que la sociedad vasca no aceptaría más que el que declarase el cese definitivo de su actividad armada. La renuncia de ETA a la lucha armada. Ojalá sea así.

Creo, sinceramente, que no tardará mucho en decretar el cese definitivo de su actividad armada. Y si no lo hace pronto, tanto ella como la izquierda abertzale, quedarán en manifiesta evidencia. Sobre su disolución, no me atrevo a hacer vaticinios. El documento aprobado el lunes en Ayete le invita a solicitar el inicio de un diálogo con los gobiernos español y francés, que versará, exclusivamente, sobre "las consecuencias del conflicto", quiero entender que, sobre las víctimas y la política penitenciaria. Hasta que ese diálogo se entable y concluya, no creo que vaya a llegar el momento de la disolución.

No sé si de las conclusiones se deduce eso. Yo tengo claro que no. Ninguna víctima es igual a otra. Pero el hecho de que haya víctimas del terrorismo de ETA, que merecen todo el calor, el reconocimiento y el apoyo que les podamos dar, no quita para que existan, también, víctimas de los GAL o de unos excesos policiales perpetrados al socaire de la lucha antiterroristas. Y cada víctima merece el tipo específico de atención que le corresponde. Como decían los clásicos: Suum quique tribuere.

Las políticas de empleo que se están implementando en España son manifiestamente mejorables. La última reforma legal, aprobada este mismo y año, y todavía en fase de implementación, pone de manifiesto que lo que se estaba haciendo hasta ahora estaba, en general, obsoleto y desfasado. El hecho de mismo de que los que acceden a un empleo manifiesten, en un elevadísimo porcentaje, que encontraron trabajo al margen del sistema oficial, avala esta consideración. Hay mucho que mejorar y existen en Europa modelos eficaces en los que nos podemos inspirar.

Creo, sinceramente, que no tardará mucho en decretar el cese definitivo de su actividad armada. Y si no lo hace pronto, tanto ella como la izquierda abertzale, quedarán en manifiesta evidencia. Sobre su disolución, no me atrevo a hacer vaticinios. El documento aprobado el lunes en Ayete le invita a solicitar el inicio de un diálogo con los gobiernos español y francés, que versará, exclusivamente, sobre "las consecuencias del conflicto", quiero entender que, sobre las víctimas y la política penitenciaria. Hasta que ese diálogo se entable y concluya, no creo que vaya a llegar el momento de la disolución.

Creo que su cometido no consistía exactamente en actuar con imparcialidad. No venían a arbitrar un partido de fútbol o a dictar sentencia en un pleito. Hasta donde yo sé -y así lo reconocen en el preámbulo del documento de conclusiones- vinieron a prestar asesoramiento y emitir su opinión, sin pretensión alguna de invocar una autoridad que no reivindican o de dar lecciones a quienes conocemos el problema de ETA bastante mejor que ellos. Yo no lo hubiese escrito tal y como está. Hubiese huído de la retórica habitual de la izquierda abertzale; algo que el documento no hace como a mí me hubiese gustado que lo hiciera. Con todo, creo que el documento es válido. La única exigencia incondicionada que establece es aquella en la que llama a ETA a que declare el cese inmediato de todas sus actividades armadas. No es poco. Sobre las conversaciones de tipo político se limita a "sugerir" que los representantes políticos nos reunamos a debatir sobre cuestiones políticas. Nada nuevo. Es lo que hacemos todos los días en los ayundamientos, las juntas generales, el Parlamento vasco, las Cortes Generales y hasta el Parlamento europeo.

Los organizadores de la Conferencia -Lokarri- dicen que ellos no les pagaron un un solo euro. Carezco de más información. Si usted la tiene -información o sospechas fundadas- sería bueno que las compartiese con los participantes del chat.

No sé si de las conclusiones se deduce eso. Yo tengo claro que no. Ninguna víctima es igual a otra. Pero el hecho de que haya víctimas del terrorismo de ETA, que merecen todo el calor, el reconocimiento y el apoyo que les podamos dar, no quita para que existan, también, víctimas de los GAL o de unos excesos policiales perpetrados al socaire de la lucha antiterroristas. Y cada víctima merece el tipo específico de atención que le corresponde. Como decían los clásicos: Suum quique tribuere.

Las políticas de empleo que se están implementando en España son manifiestamente mejorables. La última reforma legal, aprobada este mismo y año, y todavía en fase de implementación, pone de manifiesto que lo que se estaba haciendo hasta ahora estaba, en general, obsoleto y desfasado. El hecho de mismo de que los que acceden a un empleo manifiesten, en un elevadísimo porcentaje, que encontraron trabajo al margen del sistema oficial, avala esta consideración. Hay mucho que mejorar y existen en Europa modelos eficaces en los que nos podemos inspirar.

Creo, sinceramente, que no tardará mucho en decretar el cese definitivo de su actividad armada. Y si no lo hace pronto, tanto ella como la izquierda abertzale, quedarán en manifiesta evidencia. Sobre su disolución, no me atrevo a hacer vaticinios. El documento aprobado el lunes en Ayete le invita a solicitar el inicio de un diálogo con los gobiernos español y francés, que versará, exclusivamente, sobre "las consecuencias del conflicto", quiero entender que, sobre las víctimas y la política penitenciaria. Hasta que ese diálogo se entable y concluya, no creo que vaya a llegar el momento de la disolución.

¿Repetir preguntas? He respondido varias ya, ¿no?

Creo que su cometido no consistía exactamente en actuar con imparcialidad. No venían a arbitrar un partido de fútbol o a dictar sentencia en un pleito. Hasta donde yo sé -y así lo reconocen en el preámbulo del documento de conclusiones- vinieron a prestar asesoramiento y emitir su opinión, sin pretensión alguna de invocar una autoridad que no reivindican o de dar lecciones a quienes conocemos el problema de ETA bastante mejor que ellos. Yo no lo hubiese escrito tal y como está. Hubiese huído de la retórica habitual de la izquierda abertzale; algo que el documento no hace como a mí me hubiese gustado que lo hiciera. Con todo, creo que el documento es válido. La única exigencia incondicionada que establece es aquella en la que llama a ETA a que declare el cese inmediato de todas sus actividades armadas. No es poco. Sobre las conversaciones de tipo político se limita a "sugerir" que los representantes políticos nos reunamos a debatir sobre cuestiones políticas. Nada nuevo. Es lo que hacemos todos los días en los ayundamientos, las juntas generales, el Parlamento vasco, las Cortes Generales y hasta el Parlamento europeo.

Los organizadores de la Conferencia -Lokarri- dicen que ellos no les pagaron un un solo euro. Carezco de más información. Si usted la tiene -información o sospechas fundadas- sería bueno que las compartiese con los participantes del chat.