Off the record - 14 abril 2008

Cosas que rechinan en el gobierno... y en la oposición

Este Criti.com ha tenido la oportunidad, en sus varias facetas y personalidades, de charlar con algunos estamentos sociales acerca del único tema de conversación posible en estos días: la actualidad política reflejada en el nuevo gobierno Zapatero y en lo que sucede en el principal, único en realidad, partido de oposición. Y hay cosas que rechinan en el nuevo elenco gubernamental: por ejemplo, la presencia de Miguel Sebastián, inconcebible para no pocas personas con responsabilidades en el mundo económico. Pedro Solbes ya nos ha advertido de que el vicepresidente es él, y (más o menos) se hará lo que el quiera. Pero, en principio, la situación se retrotrae a los tiempos en los que Montilla era ministro de Industria y no hacía ni puñetero caso a ‘su’ vicepresidente económico. Claro que Sebastián, doctor en Ciencias Económicas y con una larga trayectoria en la teoría, no es el Montilla desconocedor del Departamento que le tocó vivir. Pero la larga serie de desencuentros entre Sebastián y Solbes no preludia nada bueno, y esta situación solamente se explica por el deseo de ZP de no dar todo el poder de la planificación económica a una sola persona. Y eso que parece que Solbes había exigido más competencias para seguir en el cargo...

Y hemos hablado también con algún militar sensato, pausado, ni de izquierdas ni de derechas, que se ha mostrado algo alterado -vamos a llamarlo así- ante el nombramiento de alguien tan joven, tan inexperto en el cargo, como Carmen Chacón para dirigir los destinos de la Defensa española. Ojalá que las estructuras, bien cimentadas por los Serra -ambos-, García Vargas, Trillo y Bono, aguanten a pie firme, nos dice el militar, en la reserva –son los únicos que se atreven a abrir la boca- y que ocupó algunos puestos de interés. Dice algunas cosas sobre la presunta influencia del marido de la señora Chacón sobre el ánimo de ZP, y no olvida que, amén de las estructuras tradicionales, doña Carme tendrá que ver con los servicios secretos, algo tendrá que decir (y coordinar) en los servicios de información de la Guardia Civil y en otras cuestiones sensibles relacionadas con la política exterior y de inmigración. Ahí es nada. Este diario, en todo caso, ha decidido nombrar un corresponsal de Defensa, cargo que recaerá en nuestro colaborador Fernando Reinlein, que fue capitán de la Unión Militar Democrática, y represaliado como tal por el franquismo, lo que le permitió abrir una fructífera carrera en el periodismo.


También hay apoyos dentro del Ejército para Chacón

A las primeras críticas sobre Chacón hay que añadir un escrito que rompe con la dinámica contra la nueva titular de Defensa. Llega desde la Federación de Asociaciones de Militares de España (FAME), que dice que el nombramiento le ha “llenado de satisfacción y esperanza (…) y a todos los militares, muy especialmente a la Tropa Profesional, Suboficiales y Oficiales procedentes de Suboficial. Creemos que tiene una gran labor por delante para modernizar a las Fuerzas Armadas, logrando situarlas en el siglo XXI”.

Eso sí, una pequeña advertencia: “Deberá escuchar a los numerosos Altos mandos  que la asesorarán (…), pero también a todos los demás militares y a las asociaciones que los representan (…). Y deberá abrir las ventanas del ministerio -de par en par- para que entren los aires, sus aires, de renovación que tanta falta nos hacen”.


Ministras inexpertas

Los más frívolos comentaristas han hablado de las ‘jóvenes inexpertas’ y algún colega desvergonzado (y algo machista) se atreve incluso a ponerle nombre de ‘modistillas’ a algunas de las mujeres que se han integrado en el gabinete por mor de la paridad de sexos. En fin, que nosotros diríamos que la composición del nuevo gobierno, que no ha hallado serios críticos en la oposición -lo de Rajoy, llamándole “continuista” fue un ejercicio de pereza mental- , ha provocado, sin embargo, que muchas cejas se enarquen: ¿quo vadis, Zetapé?

Pues nosotros no sabemos muy bien hacia dónde y cómo piensa administrar su once millones largos de votos. Pero diríamos que el presidente que hoy celebra su primer consejo de ministros se ha puesto el mundo por montera, ha decidido hacer lo-que-le-da-la-gana y ya piensa, de nuevo, en ‘tomar’ por asalto algunas torres que en el período anterior no pudo tomar: tiemblen en la presidencia del BBVA y quién sabe si hasta en Telefónica, pese a la habilidad y diplomacia con las que César Alierta supo capear el primer temporal; lanzado, por su voluntad, el ex consejero de Telefónica don Manuel Pizarro a la escollera política -a ver cómo se marcha ahora, después de que Rajoy le espetase que pasará cuatro años como ‘diputado de a pie’-, ahí queda Javier de Paz, el hombre que más influye en Zapatero, como quién sabe si futuro capitán del enorme barco, la empresa española más importante y multinacional; es un proyecto, claro, a medio plazo (¿tres años?), pero atención, que ahí está.

Así que lo que podemos esperar es exactamente lo que podemos esperar de este nuevo período. Nosotros, ya se lo decimos, bastante poco, porque el presidente sigue con sus obsesiones, heredadas de los consejos -renovados y ahora con galones- de Barroso, recomendando mano dura con estos chicos de la prensa digital. Delenda est, al menos en algunos casos. Continuará.