Caamaño es quien 'veta' a Enrique López

Que hay un veto socialista para que el juez Enrique López no recale como magistrado del Tribunal Constitucional por el turno del Congreso de los Diputados es una evidencia, pero ahora se puede poner cara y nombre al autor, o uno de los autores, del citado veto: el ministro de Justicia, Francisco Caamaño.

Caamaño ha confesado públicamente que quiere una rápida solución para la renovación total del Tribunal Constitucional, pero dice que "tiene que ser por amplio consenso". Ya sabemos que el "amplio consenso" en este país se dilucida por el 'acuerdo' a dos, es decir, entre el PP y el PSOE, que son los que cuentan con la mayoría necesaria para tal fin. Así que el ministro añade que los candidatos que presenten los dos partidos -socialistas y populares- tienen que cumplir "indubitadamente" los requisitos necesarios.

Con lo anterior, Caamaño lo que dice es que veta a López porque, según los cálculos socialista, no cumple "indubitadamente" los años de juez precisos, algo que no comparten, naturalmente, ni López ni el PP. Y Caamaño quiere acelerar la elección para dejar fuera a López, porque, aún suponiendo -como precisan los socialistas- que no cuentan los años en los que López estuvo como vocal en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), lo cierto es que en el próximo mes de mayo tendría ya acreditado el tiempo necesario. Es decir, que en este caso el tiempo corre contra el PSOE y por eso Caamaño quiere una solución rápida.

Sin embargo, según ha sabido este diario e-Xclusivo de fuentes solventes, la elección de los magistrados del TC que faltan por renovar no se producirá hasta "después de las elecciones de mayo", así que el PSOE tendrá que 'tragar' con López, quiera o no.


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