El secretario de Salud de Chiapas, Adrián Pérez Vargas dijo haber dejado el cargo en protesta por los actos de discriminación del que fue objeto por el Gobierno federal. Lo anterior en referencia a las declaraciones que hizo el secretario de Salud federal, José Ángel Córdova respecto a que Pérez Vargas estaba “infectado” por el virus de la influenza AHINI. Tras desmentir la enfermedad del funcionario chiapaneco, el gobierno de Juan Sabines subrayó que Córdova Villalobos carece de pruebas respecto a la salud de Pérez Vargas, por lo que pidió a la SSA federal abstenerse de dar a conocer los nombres de las personas que han contraído el mortífero virus.
El gobierno de Juan Sabines informó que hasta el momento se han detectado 2, 664 casos positivos y 19 fallecimientos, por la influenza. Agregó que será en el curdo de hoy jueves cuando el gobernador estatal de a conocer el nombre del nuevo secretario de salud en la entidad.
Lo único extraño aquí, es que sin defender para nada a Córdoba Villalobos, el gobernador de Chiapas Juan Sabines, tendría que dar una amplia explicación no sólo a la opinión pública de esa entidad sino al país en general, pues por un lado asegura estar muy molesto por la "discriminación de que fue objeto" el titular de salud estatal Adrián Pérez Vargas, pero su "apoyo" se tradujo en el relevo o cese del funcionario, como usted quiera llamarle. Lo cual hace pensar, cuando menos que Pérez Vargas, si está enfermo de influenza y que a Sabines le faltó tacto político para manejar esta situación y sugerirle en corto a Córdova Villalobos, que no hablara de más, rompiendo con un principio básico de la ética médica, que implica en no dar a conocer la enfermedad de los pacientes.