El viceministro de Relaciones con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, lamentó en declaraciones a la prensa que esa concentración, que reunió a decenas de personas, estuviera encabezada por dos manifestante vestidos de "gorila" y "mono" que representaban a los mandatarios de Venezuela y Bolivia.
Según Llorenti, en esa protesta se pudieron oír "insultos incluso de autoridades departamentales que hablaban de macaco" para referirse a ambos líderes latinoamericanos.
"Esto es muestra de que todavía no hemos superado la etapa colonial de comparar a los indígenas con animales", afirmó el viceministro.
La movilización de Santa Cruz formó parte de una campaña de manifestaciones en varios países contra las injerencias en otros países de Chávez en respuesta a una convocatoria lanzada por un grupo de jóvenes colombianos a través de Internet.
En Bolivia, además de la protesta en la capital cruceña, que fue la más numerosa, en La Paz una treintena de personas se concentró en los alrededores de la embajada de Venezuela.