domingo 17 de enero de 2010, 18:55h
Domingo por la mañana. Durante mi habitual paseo, me encuentro con el vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, camuflado de ciclista y protegido por sus guardaespaldas en la Palmera. Como casi todos los fines de semana, Chaves viene a Sevilla para estar con su familia, pero, fiel a sus principios, no deja pasar un día sin hacer el habitual ejercicio para estar en forma. Lo encuentro tranquilo y nada preocupado por la que le está cayendo con el asunto de Matsa y su hija Paula. Tampoco parece preocuparle la encuesta del IESA que le da la victoria al PP. Él sigue a lo suyo, a darle a los pedales y que Griñán aguante su vela.