Un cumpleaños muy comentado

Mucho ha dado que hablar la fiesta de cumpleaños celebrada hace días por todo lo alto por Chema Crespo, el ya histórico socialista palentino que hace tres años dejó la política activa para pasar a ocupar un cargo directivo en “Público”, el diario del grupo Mediapro.

Crespo no quiso que su 50 aniversario pasara inadvertido y decidió festejarlo agasajando a sus muchos amigos en el Hotel Castilla La Vieja, de la capital palentina. El topillo no fue invitado y bien que lo siente, tanto por lo mucho que hubiera podido curiosear en el encuentro como por la calidad de los canapés servidos y la posterior barra libre que puso broche al agasajo.

Pero han sido tantos los ecos llegados a su madriguera que al topillo no le queda más remedio que recoger algunos. Me cuentan que entre el centenar largo de invitados predominaron lógicamente los compañeros de partido del que en sus tiempos mozos fuera secretario regional de las Juventudes Socialistas y luego, durante cuatro Legislaturas, procurador de las Cortes Regionales. La relación recopilada es muy extensa e incluye entre otros insignes a Demetrio Madrid, Jesús Quijano, Octavio Granado, Tomás Rodríguez Bolaños, Heliodoro Gallego, José Francisco Martín, etc. y por supuesto a su siempre compañero del alma Javier de Paz, el que fuera secretario general de las Juventudes Socialistas con Felipe González, hoy  consejero de Telefónica y asesor áulico de Zapatero.

Junto a esa “vieja guardia” se dieron cita otros ilustres socialistas amigos de aquí y allá, tales como Fernando Moraleda, Rafael Cortés Elvira, Nicolás Redondo Terreros e incluso José Miguel Vidal Zapatero, el famoso primo del presidente del Gobierno. (También estuvo la secretaria personal de Sonsoles Espinosa, que no es otra que Ana Pérez Santamaría, esposa de Javier de Paz).

Le cuentan al topillo que tan llamativas fueron las presencias como las ausencias. En la lista de “no invitados” podrían incluirse nombres como los de Ángel Villalba, Fernando Benito, Francisco Ramos o Julio Villarrubia y otros cuantos compañeros de partido a los que Crespo no tiene precisamente por amigos. Luego están otros correligionarios que se han sentido incluso “dolidos” por no haber sido convocados al evento. No es el caso de Óscar López, que estaba invitado y no acudió por cuestión de agenda.

También ha trascendido el mosqueo de algunos insignes del gremio periodístico,  que, siendo filosocialistas y habiendo compadreado lo suyo con el amigo Chema, no fueron  distinguidos con su invitación. En algún caso el mosqueo ha pasado a ser cabreo cuando han conocido con detalle la selecta nómina de periodistas asistentes, muy bien vistos casi todos en el Colegio de la Asunción.

En fin, el topillo, que es de los que perdona  pero no olvida, espera ser invitado al 60 cumpleaños, más que nada porque ello significará que “Diario Critico Castilla y León” habrá cumplido sus diez primeros años de feliz existencia.