Es la imagen del día sin discusión: la victoria de
Fernando Alonso en el Gran Premio de Singapur le ha dado la vida al piloto asturiano de Ferrari. Su alegría, tras dos horas de larguísima carrera, supuso un subidón de adrenalina para Alonso, que dio este salto en el podio para liberar tensiones y escenificar lo mucho que signfica el triunfo de cara al Mundial. Fernando ya es segundo en la clasificación y parece que olvida así los malos momentos que durante el año ha tenido que atravesar. Tenacidad, empeño y esfuerzo han sido las claves para acallar críticas y seguir creyendo en sí mismo y su equipo.
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Si (
No(
