www.diariocritico.com

El "síndrome Valdeón" (II)

miércoles 15 de diciembre de 2010, 20:07h


 
“Dícese del temor preelectoral que se apodera del político con cargo de primer nivel en la Junta o en las Cortes susceptible de ser elegido por el presidente Herrera para asumir la candidatura del PP a la Alcaldía de la capital de su provincia de origen”.

Con estas palabras definíamos en el mes de octubre lo que hemos dado en llamar “síndrome Valdeón”, que toma su nombre de la ex Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, quién, en vísperas de las anteriores elecciones municipales, hubo de abandonar su cargo en la Junta para encabezar la lista del PP al ayuntamiento de Zamora. Dejábamos entonces a un lado a Alfonso Fernández Mañueco, cuya sintomatología presentaba rasgos diferentes, y señalábamos dos nombres expuestos a contraer dicho “síndrome”: Antonio Silván, el consejero de Fomento, y Carlos Fernández Carriedo, el portavoz del grupo popular en las Cortes Regionales.
 

Dos meses después, ambos siguen siendo firmes candidatos, mal que les pese, a encabezar el cartel electoral del PP en los ayuntamientos de León y Palencia. “El topillo” contaba ayer que el fantasma de esa nominación se cierne por momentos sobre el risueño Silván. No solo porque es el mejor valorado de la media docena de posibles candidatos que se han venido barajando en León. Hay otros dos, Javier García Prieto y Cecilio Vallejo, que presentan asimismo un elevado grado de aceptación interna y externa.

Ocurre que hay otro factor que puede decantar la decisión irremisiblemente del lado del consejero de Fomento. Consiste en que desde la dirección regional del partido la elección del candidato va mas allá del alcance meramente municipal. Dada la situación interna del partido en León, la apuesta es que el candidato a la alcaldía de la capital, si gana las elecciones, sea el llamado a tomar las riendas del PP leonés tan pronto se celebre el próximo congreso provincial.
Catapultado por el éxito que supondría arrebatar al PSOE el ayuntamiento de León, el nuevo alcalde se convertiría en el hombre fuerte destinado a hacerse cargo de la presidencia provincial del partido, poniendo fín a la pesadilla interna que para la mayoría representa Isabel Carrasco. Y Silván siempre ha estado dispuesto a asumir  ese liderazgo. De ahí que tenga ahora mismo casi todas las papeletas.

 El caso de Carlos Fernández Carriedo es diferente, entre otras cosas, porque ya es el presidente provincial del PP.  A diferencia de lo que sucede en León, su problema es que en Palencia no se ha puesto sobre la mesa ni un solo candidato con entidad suficiente  para poder  desbancar al  socialista Heliodoro Gallego. Ni la ya derrotada Celinda García ni el delegado territorial de la Junta, el ominipresente José María Hernández, ni el concejal y gerente de servicios sociales de la Junta, Alfonso Polanco parecen rivales de fuste  para disputar la alcaldía al veterano Gallego.

 Esta falta de alternativas solventes es la que pone en el punto de mira a Fernández Carriedo. Pero además existe otro factor colateral que puede jugar en esa misma dirección. Se trata de lo apetecible que resultaría la vacante que el político palentino dejaría en las Cortes regionales. En el horizonte de un gobierno regional con una drástica reducción de Consejerías -ocho como máximo- el cargo de portavoz del grupo parlamentario popular va a estar especialmente cotizado. Y tengo la impresión de que alguien muy influyente está interesado en empujar a Carriedo hacia el ayuntamiento de Palencia.  (Continuará)

(En las fotografías, Antonio Silván y Carlos Fernández Carriedo)

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios