España está atravesando una de sus olas de calor más intensas y tempranas de la historia, por lo que el aire acondicionado se ha convertido en un 'must' para muchos. Pero con la subida del precio de la luz muchas familias se resisten a ponerlo para evitar más incrementos en la factura eléctrica.
Aunque el uso del aire acondicionado acarrea un gasto extra en la factura de la luz en verano, este año dado el contexto de crisis energética que ha llevado a un elevado precio de la electricidad, se mira más cómo ahorrar. Pero tal y como explican desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), se puede hacer uso de este dispositivo y ahorrar un poco en la factura si se tienen en cuenta determinados factores.
El consumo eléctrico de un aparato de aire acondicionado durante el verano puede alcanzar los 250 euros dependiendo de su eficiencia, el número de horas que se utilice y la zona climática donde esté la vivienda. Pero siguiendo los consejos de la OCU, es posible disfrutar del aire acondicionado y ahorrar en la factura.
Además, "hay sistemas pasivos que implican diseño de fachadas, tanto en el empleo de materiales, protectores y aislamientos así como orientaciones y distribuciones interiores que aprovechen las condiciones climatológicas”, explica Guillermo Vidal, director de Diseño de UXBAN
Entre sus recomendaciones, usar el aire acondicionado sin fuentes de calor cerca de los termostatos para no enviar una información engañosa al sistema. “No es recomendable que haya una diferencia de temperatura superior a los 15 grados respecto del exterior, ya que cada grado de temperatura que deseemos reducir aumenta el consumo energético entre un 5-10%”, según la firma Uxban, que recomienda, que al realizar una reforma de una vivienda revisar el aislamiento térmico. “El ahorro en suministro de energía en verano e invierno alcanza el 30% anual”, subraya arquitecto.
Recomienda también colocar los equipos exteriores en las fachadas donde menos incida la luz solar. “Los equipos que operan a la sombra emplean un 15% menos de electricidad. También es importante zonificar el interior de la vivienda, de manera que cada estancia se regule con termostatos independientes”, resalta.
Aportar espesor a los muros de fachada con materiales aislantes. ”Aunque se reduzcan unos pocos centímetros el espacio interior- junto a la colocación de ventanas con vidrios dobles o triples con cámara de aire- ayuda de forma trascendental a este ahorro”, explica Vidal.