www.diariocritico.com

Un trabajador sufre quemaduras al recoger una fuente radiactiva

martes 30 de septiembre de 2008, 11:29h
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha abierto un expediente informativo a la empresa Cualicontrol-ACI tras haberse producido un incidente en el cual uno de sus trabajadores sufrió quemaduras en tres dedos por haber estado expuesto a radiaciones muy por encima de los niveles permitidos.
Cualicontrol-ACI tendrá que explicar al CSN las circunstancias en las que se produjo el suceso, así como el porqué de que no se informara sobre el alcance real del mismo.

El CSN ha informado que recibió el pasado 25 de septiembre un comunicado del Centro de Radiopatología y Radioprotección del Hospital General Universitario Gregorio Marañón (HGUGM), en el cual indicaba que había atendido a un trabajador con lesiones en tres dedos de su mano derecha provocadas por una exposición a la radiación emitida por una fuente radiactiva de Iridio-192.

La cantidad estimada que el trabajador recibió en la mano es de 10 Sievert,  dosis muy superior a los límites permitidos (500 milisievert/año para las extremidades) así como a los valores umbrales a partir de los cuales aparecen lesiones locales de forma inmediata.

Actualmente, el trajabador presenta una evolución favorable de las lesiones, sin que se hayan apreciado repercusión sobre su estado de salud general.

Aún así, el HGUGM ha recomendado mantener controles sobre las lesiones así como por posibles alteraciones analíticas.

La irradiación se produjo durante un incidente en la instalación radiactiva de la empresa Cualicontrol-ACI en Madrid, el 1 de agosto, y comunicado al CSN el día 4.

Dicho día el operador realizaba labores de radiografiado de una tubería en el interior de un recinto blindado que "no contaba con las medidas de seguridad requeridas para el equipo que estaba siendo utilizado".

Al acceder al recinto con el objetivo de cambiar el equipo de posición para realizar la siguiente radiografía, el trabajador desenroscó la manguera de salida del equipo y observó que la fuente había quedado unos centímetros fuera de su contenedor de blindaje al no haberse retirado hasta la posición de seguridad.

El trabajador no se percató del exceso de irradiación al no oir la alarma acústica de su dosímetro de lectura directa, ya que llevaba una protección auditiva para evitar el nivel de ruido en el exterior del recinto.

La evaluación inicial del suceso, a partir de las dosis indicadas por las lecturas del dosímetro de lectura directa y del dosímetro oficial (1,7 milisievert), permitían valorar el suceso como de "muy escasa significación radiológica".

A pesar de que el trabajador fue remitido al Gregorio Marañón, el día 7 de agosto, el CSN no fue informado sobre el alcance real de la irradiación sufrida por el trabajador hasta recibir el informe del citado centro hospitalario.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios