La treintena de inmigrantes que viaja en el primer 'Hércules' fletado, salían poco antes de las 16.00 horas de este martes. Según el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores español, los 'sin papeles' son nacionales de Costa de Marfil, Liberia y Sierra Leona, hacia Guinea Bissau.
Otro avión fletado por el Gobierno español repatriará este miércoles desde Mauritania a Nueva Delhi a decenas de ciudadanos indios que viajaban en el 'Marine I'. El vuelo saldrá de Nouadhibou y hará escala en Madrid antes de continuar su viaje hacia Nueva Delhi, precisaron las mismas fuentes que además confirmaron que el número total de personas que viajaban en el 'Marine I' era de "369" y que todos han hecho ya una "primera declaración de identidad" tras haber recibido atención médica.
El resto de los inmigrantes que viajaban en el barco, siguen esperando en tierra, en el aeródromo de Nouadhibou, el puerto en donde desembarcaron el lunes. Mauritania afirma tener problemas con ellos debido a la negativa de muchos a identificar su nacionalidad para evitar ser repatriados. Según Mohamed Vall "los inmigrantes dicen ser refugiados políticos, que no deben ser repatriados. Dicen, además, que de acuerdo a la Convención de Ginebra debe permitírseles poder ir a España".
Se cree que muchos de los inmigrantes son pakistaníes, la mayoría de la región de Cachemira, colindante y en conflicto latente con la India, de aquí la presencia de representantes de ambos países en la identificación realizada el lunes en el puerto de Nouadhibou, que acudieron a la zona para facilitar la labor de reconocimiento. Parece ser que esta presencia no ha servido de mucho ya que los inmigrantes están evitando facilitar sus datos para obstaculizar su repatriación.
Atención sanitaria
Desde el desembarco, tanto Médicos del Mundo como Cruz Roja se dedicaron a prestar atención sanitaria a los inmigrantes, una vez desembarcaron. Tras los exámenes médicos, que fueron mucho más positivos que las primeras previsiones que se hicieron, se procedió a identificar a cada uno de los pasajeros del buque, aunque en muchos casos no se pudo hacer.
"De los 367 inmigrantes atendidos, la mayoría se encontraba en buenas condiciones", según explicó Pino González, la representante de Médicos del Mundo, precisando que "aproximadamente más del 50% presentaba algunos problemas leves en forma de molestias gastrointestinales y respiratorias, así como quemaduras", hecho por el cual no se tuvo que realizar ningún ingreso hospitalario.
En cuanto al grupo de inmigrantes asiáticos, según Pino González, se encuentra abatido por el desenlace de la travesía que, en el caso de algunos, ha durado meses. "Ha sido difícil tratar a personas con la mirada baja, que se encuentran apesadumbradas por todo el esfuerzo que han realizado en busca de una vida mejor y que no han logrado", señaló Pino.
Rubalcaba admite dificultad
Por su parte, el ministro del Interior español, Alfredo Rubalcaba, admitió en el Congreso que la situación de tensión que se vive en Guinea Conakry, creaba "alguna dificultad" al Gobierno español en las repatriaciones ya que éste país y España habían llegado a un acuerdo la pasada semana para destinar allí a los inmigrantes africanos embarcados en el 'Marine I'.
Respecto a la posibilidad de que los inmigrantes sean trasladados a Canarias para proceder desde allí a su repatriación, Rubalcaba insistió en que tras las identificaciones se dará lugar a las repatriaciones pero no aclaró ningún dato más acerca de dónde. Según informó el lunes el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, el Gobierno también había entrado en conversaciones con Cabo Verde y Senegal para encontrar un lugar seguro para los inmigrantes subsaharianos.
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