Efectivamente, en el mes de julio, seis de cada diez españoles (un 58.3%) decían que la situación económica general de España era mala o muy mala frente a un minoritario 6.8% que contestaba lo contrario (muy buena o buena). Respecto a la situación de hace un año, de nuevo el desánimo se hacía con la mayoría de los españoles, el 65.1% creía que ahora estábamos peor.
La percepción negativa de los españoles no mejora cuando se le pregunta por las expectativas a la vista de un año. Casi la mitad (47.4%), considera que dentro de un año la situación será peor que la de ahora; aunque un 26.6% cree que estaremos igual y un 11.7% muestra su optimismo y dice que estaremos mejor.
Sobre los problemas que nos acechan, el protagonismo económico es abrumador; un 59.8% de los españoles menciona los problemas económicos en primer lugar, seguido del paro con una respuesta del 56.1%. A continuación, con porcentajes bastante inferiores, salen la inmigración (27.9%), la vivienda (21.4%) y el terrorismo (20.3%).
Será interesante conocer la sensación actual de la población cuando ya se habla de recesión y continuamente nos informan de las medidas anticrisis que gobiernos y organismos internacionales están adoptando.