Gallardón quería chivarse al Papa

Publica hoy el diario El Mundo una entrevista con el alcalde de Madrid, Alberto Ruíz-Gallardón en la que el regidor dice que Rouco Varela suspendió una audiencia que tenía el político con el Papa, Benedicto XVI. En dicha audiencia pretendía transmitir al pontífice sus quejas sobre la cadena COPE y muy especialmente contra su locutor estrella, Jiménez Losantos. Vamos que se quería chivar al papa y Rouco, que es más largo que un día sin pan, viéndolas venir, canceló la merienda y zanjó el asunto.

No encuentro ningún motivo para repetirme en el tema de mis columnas salvo que sea un asunto que me cabree. Y hay dos que lo hacen constantemente, uno es la obligación de usar lenguas periféricas como catalán y gallego por parte de algunas autoridades y otro es la cadena COPE. No es ningún secreto (lo he dicho alguna vez) que soy católica y, precisamente por eso, me escandalizo con la COPE. Pecan justo de lo que predican. No puedo entender que Jiménez Losantos escupa tanto veneno por esa boquita en una cadena que representa a una Iglesia cuyo lema principal es el amor al prójimo. Se me escapa y no veo por ninguna parte la conexión.  No puedo entender cómo este pequeño hombre tiene tan encandilados a unos oyentes que pase lo que pase, la culpa siempre es de Zapatero (la ola de frío también por si queda alguna duda).

También tiene enemigos en el PP. Ejemplo, el propio alcalde, contra el que ha emprendido una cruzada que ríanse ustedes de las del Santo Grial.  Si es verdad lo que Gallardón cuenta en la entrevista, la cosa tiene bemoles. Si Rouco Varela ha hecho eso, demuestra que conoce muy bien las maneras estilo mafia siciliana y demuestra también que se tiene que repasar el catecismo.

Losantos que siga diciendo lo que le venga en gana, pero que lo haga desde otra emisora, otra que ni sea de la Iglesia ni mucho menos nacional. Que reparta su odio fuera del templo.  Esto es la caída del Imperio Romano. ¡¡¡Dios!!!