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La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CNSM) de México acordó otorgar un aumento general a la remuneración mínima diaria del país para el 2009 de 4,6 por ciento, informó hoy el organismo.
La dependencia, compuesta por representantes del Gobierno, organizaciones patronales y de trabajadores, señaló en un comunicado que el aumento entrará en vigor a partir del 1 de enero próximo, en las tres áreas geográficas en las que las autoridades mexicanas dividen la aplicación del salario mínimo.
Para el área geográfica "A", que comprende a la capital mexicana y su área metropolitana, los estados de Baja California y Baja California Sur, las ciudades de Acapulco, Ciudad Juárez, Nogales, Matamoros y Coatzacoalcos, entre otras, el salario mínimo diario será de 54,80 pesos (unos 4,15 dólares).
En cambio, para el área geográfica "B", que incluye a ciudades como Guadalajara, Monterrey, Hermosillo, Tampico y Poza Rica, el nivel de ingreso mínimo quedó establecido en 53,26 pesos diarios (unos 4,03 dólares).
Por su parte, los trabajadores de la zona "C" cobrarán un salario mínimo diario de 51,95 pesos (3,95 dólares).
De esta zona salarial hacen parte los estados de Aguascalientes, Campeche, Coahuila, Colima, Chiapas, Durango, Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Tabasco, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas.
Asimismo, integran el área "C" otros municipios específicos de los estados de Chihuahua, Guerrero, Jalisco, Estado de México, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas y Veracruz.
Los integrantes de la CNSM acordaron además iniciar un proceso de disminución de las diferencias entre las distintas áreas geográficas (A, B y C).
Para ello resolvieron disminuir la diferencia entre las áreas geográficas "A" y "B", del 3,20 por ciento al 2,89 por ciento; y entre la "A" y "C", del 6,24 por ciento actual a 5,49 por ciento.
Según el presidente de la Comisión, Basilio González, la determinación de los nuevos salarios mínimos se realizó de manera unánime y contribuye "a paliar la crisis económica, conciliando los diversos intereses en beneficio de México".
Los empresarios se comprometieron a "realizar su máximo esfuerzo para salvar la planta productiva del país y preservar las fuentes de empleo, en línea con una actitud moderada del sector obrero en sus exigencias salariales", destaca la nota.
Adicionalmente, convinieron que el incremento de los salarios mínimos no tiene que tomarse necesariamente como "la base ni el límite para las revisiones contractuales, sino que se considere la capacidad económica de cada empleador, su subsistencia y la necesaria reinversión del capital".
En días pasados, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) manifestó que sería "peligroso" para el país un aumento salarial superior al 4 por ciento, porque un incremento "desproporcionado" podría afectar a las empresas, las cuales ya enfrentan la crisis económica mundial.
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