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El juez mantiene en prisión al presunto asesino de Heaven

viernes 23 de enero de 2009, 17:02h

Uno de los heridos en el tiroteo que se produjo el 12 de enero en la discoteca Heaven, Roger L.U., declaró este viernes que vio al presunto doble homicida, Carlos Monje, sacar una pistola que ocultaba en la cintura, contradiciendo la versión del acusado de que encontró el arma en el suelo.

El juez ratificó este viernes la orden de prisión provisional comunicada y sin fianza de Carlos Monje dictada la pasada semana por el magistrado de guardia, como presunto responsable del doble homicidio. Monje, que declaró en los calabozos y no en el juzgado de instrucción número 32 como los testigos, se mostró "frío, tranquilo y muy seguro de sí mismo", en palabras de Abella.

Carlos Monje, alias 'El cuchillos', el presunto autor del doble crimen de la discoteca Heaven perpetrado en la madrugada del 12 de enero, declaró en los calabozos de Plaza Castilla ante el juez Santiago Torres que disparó para defenderse porque se vio "acorralado", según explicó el abogado de la familia de Catalin, Antonio Abella.

A 'El Cuchillos', de 36 años, se le acusa de dos delitos de homicidio: el de Catalin Stefan Craziun, alias 'Cata', un ciudadano rumano de 31 años que trabajaba de portero en Heaven, en la calle Arenal, y el de Alejandro Muñoz Rojas-Marcos, de 24 años, que era relaciones públicas de Joy Eslava, próxima a la discoteca donde se produjeron los hechos.

De los siete hombres que hoy declararon ante el juez como testigos del suceso, seis son porteros de Heaven: Rubén E.R, Daniel S, Abraham R.L, Ion A y Albu A; y uno, Roger L.U.V, es un cliente al que presuntamente Monje disparó cuando huía del local.

Un testigo vio a Carlos Monje sacar una pistola
Roger L.U., cliente habitual de la discoteca y que en el altercado resultó herido de bala en ambas piernas, declaró que, mientras hablaba por teléfono en el hall de la sala, vio al acusado "salir corriendo con varios porteros detrás" y que sacaba una pistola que guardaba bajo la ropa, con la que le disparó, alcanzándole en las dos piernas con una misma bala. "Yo deduzco que cuando salió pensó que yo era otro portero", añadió.

Sin embargo, Carlos Monje, el presunto asesino de uno de los porteros y un relaciones públicas de la sala, que declaró en los calabozos de los Juzgados al final la mañana del viernes, ratificó lo que dijo ante el juzgado de guardia: que encontró la pistola en el suelo y disparó en defensa propia.


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