La “Reelección Inmediata por Una Sola Vez” no debería preocuparnos siempre y cuando se acompañe con la fórmula electoral de la “Segunda Vuelta.” Esta modalidad electoral garantizaría la saludable alternabilidad del control del poder de la República; así como la renovación segura de dirigentes capaces; erradicación del pernicioso caciquismo y clientelismo político, tierra abonada para la proliferación de la corrupción. En síntesis vale decir que la Segunda Vuelta robustecería y adecentaría no solo nuestro sistema electoral, sino que más bien elevaría el nivel de civismo y cultura política a nuestro electorado. Los políticos profesionales la rechazan como es natural, porque no les permite perpetuarse en el poder ya que estimula la sana competencia y abre oportunidades a los nuevos valores comunitarios sin caudales económicos, pero sí morales e intelectuales. Señalan estos como debilidad en el afán por desprestigiar esta fórmula, que los partidos medianos y pequeños pactan espacios y posiciones con los partidos grandes para la vuelta final,…. y nos preguntamos, ¿la política no es el arte de negociar y ceder espacios para ganar oportunidades y objetivos que beneficien a las comunidades?; ¿Cuál es la historia reciente de los partidos Unión Patriótica, Molirena y Panameñismo al tranzar con Cambio Democrático?,….. ¡Negociaron, sencillamente eso, Negociaron! Sin embargo, la virtud política que nos brindaría la Segunda Vuelta consistiría en que es muy difícil un presidente en ejercicio del poder, logre la reelección solo con el caudal minoritario de los votos cautivos en la burocracia del estado, más el caudal de su partido, porcentajes que por lo general suman el 40% del total. No caben dudas, en el camino surgirán “Estadistas Campeones” que serían electos en la primera vuelta al alcanzar el 50% de los votos, pero serían casos esporádicos y solos para Campeones. Cuando proponemos una sola reelección en la vida “aunque esta no sea consecutiva” para los ex presidentes, también alcanza a los diputados, alcaldes, concejales y representantes de corregimientos, es decir todo cargo de elección popular solo tendría la oportunidad de ejercer estos cargos dos periodos de por vida, ya que la propia Constitución les impediría volver a postularse. De adentrarnos en este modelo electoral progresista, deberíamos hasta examinar la modalidad de las libres postulaciones o independientes para aspirar cargos desde Presidentes. Este tema sobre la Reelección Inmediata que los candidatos no mencionan ¡pero que mueren por ella! constituye el “As bajo sus mangas” y seguro tratarán de implementarla durante la luna de miel con el pueblo. En consecuencia hay que estar alerta y “ojo avizor” como lo expresaba Omar Torrijos, ante todo intento por reformar la Constitución, se realice precisamente sin desbordar los frenos y límites que ha elaborado La Carta en los Artículos 313 y 314 que detalla los procedimientos para proponer iniciativas sobre reformas constitucionales. De llegar repetirse esta ocasión en el transitar democrático de la República, podríamos hacer los ajustes de la Reelección Por Una Sola Vez siempre que los políticos acepten La Segunda Vuelta. El pueblo y Soberano tendrá la última palabra para detener o ¡parar en seco! a todos aquellos con banderas políticas que intente perpetuarse en el poder, cuando seamos convocados ante las urnas por virtud del Referéndum.
Rubén Dario Paredes.
Ex Ministro de Estado.
8-73-173.