‘Calentamiento local’

Como en el caso del globo terráqueo en general, en Ecuador vienen registrándose los efectos de un fuerte y singular ‘calentamiento’.  No es sólo un problema de las fuertes lluvias y sus  secuelas, del disparatado clima que padecemos, sino de todo el Ecuador en su conjunto.

Se trata de un ‘calentamiento’ peligroso e imparable en la economía, la política interna y externa, y la sociedad. No pasa un día sin que tengamos alguna noticia negativa en cada una de estas áreas.

Las dificultades económicas de hoy que, según los expertos, son pálidas en comparación con las que nos acosarán en poco tiempo, se sazonan con informaciones ambiguas, veladas o abiertamente amenazantes de los funcionarios del régimen que debería transmitir tranquilidad y confianza. Las interrumpidas relaciones con Colombia constantemente reciben fuertes inyecciones de tensión e incertidumbre.

El proceso electoral en que estamos inmersos presumiblemente será como los anteriores, con una débil oposición cargando sobre sus espaldas el peso de una desproporcionada campaña del oficialismo. Los jubilados, tanto civiles como de las fuerzas armadas y de la Policía, miran con reservas y temores muy fundados la ley que al respecto se debate en el Congresillo. 

¿Acaso no es necesaria una política de entendimiento que cristalice en la necesaria unidad nacional para enfrentar la crisis? Estos son sólo algunos aspectos del ‘calentamiento’ local al que estamos sometidos. ¿Quién lo desencadenó, promovió y sostiene? Huelga nombrar al responsable.