.jpg)
El accidente de avión que se estrelló la pasada madrugada en Montana, matando a los siete niños y siete adultos que iban a bordo, comenzó con una caída en picado del morro del avión, justo cuando se aproximaba al aeropuerto de Butte, según han explicado fuentes oficiales.
El presidente en funciones del National Transportation Safety Board, Mark Rosenker, ha dicho que su equipo está investigando la experiencia del piloto y si el avión, con 11 plazas, iba demasiado cargado. Al no tratarse de un vuelo comercial, la nave, de un solo motor, no tenía caja negra.
Un equipo de investigadores llegaba a primera hora de este lunes al lugar del accidente. La investigación puede llevar meses.
El avión modelo Pilatus PC-12 llevaba tres pasajeros menos de lo que se dijo inicialmente (cuando se habló de que habían fallecido 17 personas). De este modo, si algunos niños viajaban en el regazo de un adulto, todo el grupo habría tenido espacio a bordo.
Todavía no está claro qué pudo ocurrir a la nave. El avión hizo tres paradas en California antes de dirigirse a Bozeman (Montana) para unas vacaciones de ski, si bien no se han dado detalles sobre los pasajeros. Sin embargo, finalmente el piloto se dirigió a Butte en lugar de a Bozeman, puede que porque detectase algún problema en el aparato, según la CNN. Las dos ciudades se encuentran en una zona montañosa, en el oeste del estado.
El piloto solicitó dos veces desviarse a Butte, sin dar un motivo. En ambas ocasiones el controlador aéreo aprobó el cambio, según explicó Rosenker en rueda de prensa.
Según relató, los testigos vieron el avión volando a unos 90 metros de altura, con el morro inclinándose 90º antes de estrellarse en un cementerio, a sólo 150 metros del aeropuerto. Las imágenes mostraban una bola de fuego en el lugar del accidente.
Si (
No(
