Hablan de libertad de creación, de conciencia y de expresión para justificar lo injustificable: no ya el sacrilegio, que efectivamente hay libertad de expresión y religiosa, sino la nula calidad artística del trabajo del fotógrafo JAM Montoya, autor de una obra de pornografía religiosa que ya ha sido llevada a los tribunales.
Pero como estamos en campaña electoral, una pretendida Federación Internacional de Ateos (FIdA) ha hecho un llamamiento a la “solidaridad y el apoyo de todos los demócratas, laicistas, ateos, librepensadores y demás herejes conscientes de las consecuencias sociales implícitas en el caso de las denuncias al fotógrafo JAM Montoya por parte de los activistas ultracatólicos y de los oportunistas que intentan sacar provecho electoral”.
Se pretende conseguir firmas de apoyo a la libertad de conciencia, de creación y de expresión, ante los ataques que se están llevando a cabo como instrumentos de confrontación política, utilizando como excusa la obra de JAM Montoya, en los términos expresados en el Manifiesto '¡No a la Inquisición!'.
Esta plataforma, que no ha surgido cuando las ofendidas han sido otras religiones -recordemos la polémica mundial por las caricaturas de Mahoma, por ejemplo- han preparado, incluso, un manifiesto para ser firmado. Aunque parece que con escaso éxito.