Tras su llegada, Obama se trasladará en helicóptero a la residencia presidencial de Los Pinos, donde mantendrá una reunión de una hora y media con Calderón, primero a solas y después con la presencia de sus asesores.
Según explicó el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, a bordo del Air Force One, el propósito principal de esta visita es "mostrar nuestro apoyo a continuar nuestro acercamiento con un valioso aliado y socio comercial".
Los asuntos principales del encuentro serán la lucha contra el narcotráfico, cuya violencia ha dejado más de 10.000 muertos desde la llegada al poder de Calderón en diciembre de 2006 y que se extiende ya al territorio estadounidense.
En ese sentido, Obama prometió hacer más y anunció un "plan integral" que prevé más personal y fondos en la frontera, así como el envío de helicópteros "Black Hawk" a México.
Washington anunció este miércoles la inclusión de tres bandas mexicanas -el cartel de Sinaloa, los Zetas y la Familia Michoacana-, en su lista de organizaciones dedicadas al narcotráfico internacional.
México le reprocha la lentitud en el desembolso y el recorte de fondos de la Iniciativa Mérida, el programa de 1.400 millones de dólares para la lucha contra el narcotráfico en México y Centroamérica.
México también pide que se restablezca la prohibición de las armas de asalto en EE.UU., que el presidente Bill Clinton puso en vigor durante su mandato, pero que su sucesor, George W. Bush, dejó expirar.
Hasta el momento, Obama se ha mostrado contemporizador y asegura que lo que es necesario es aplicar de manera exhaustiva las leyes existentes en Estados Unidos.
Ambos mandatarios hablarán también sobre la reforma migratoria en EE.UU., a la que Obama quiere dar un impulso, y sobre comercio.
El presidente de EE.UU. es partidario de revisar algunos capítulos del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), algo que ya abordó en la primera reunión entre los dos mandatarios, en Washington en enero antes incluso de que Obama jurara el cargo.
El mes pasado, el Congreso estadounidense abolió un programa para la libre circulación de camiones mexicanos por EE.UU., tras lo cual, en represalia, el Gobierno mexicano impuso aranceles a productos de Estados Unidos por valor de 2.400 millones de dólares.
Tras su reunión, los dos mandatarios ofrecerán una rueda de prensa para informar de sus conclusiones.
El presidente estadounidense concluirá su jornada con una cena con los legisladores mexicanos en el Museo Nacional de Antropología.
El viernes, Obama partirá este viernes hacia Trinidad y Tobago, donde participará en la V Cumbre de las Américas.
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