“Estados Unidos, Venezuela, Canadá, México, los países más fuertes (de América), e inclusive el Perú, podrían apoyar esto y de esta manera salvar nuestro continente de la crisis económica que lo amenaza”, declaró.
García reveló que ese fue uno de los puntos que discutieron en el marco de la V Cumbre de las Américas, donde -dijo- el presidente Obama tuvo el gesto amable y gentil de pedir que el jefe del Estado peruano se siente a su derecha al momento del almuerzo.
“Estuvimos conversando sobre lo que me tocó plantear y me imagino que quedó sensibilizado en algunos temas; yo mencione por ejemplo que esta reunión tenía por efecto generar confianza que se tenía que traducir en los próximos días”, dijo.
El mandatario mencionó que dicha confianza se vio reflejada en la relación que tuvo con los presidentes de Venezuela y Cuba durante la reunión de la V Cumbre de las Américas, donde el mandatario estadounidense ha demostrado una “voluntad de escuchar”. “Eso genera confianza y eso va a rebotar económicamente también”, aseveró.
Manifestó que América Latina es un continente de enorme importancia para la economía de Estados Unidos, ya que existen 45 millones de latinos dentro de ese país y todos son trabajadores.
“En conjunto somos (América Latina) un gran comprador de las materias norteamericanas y un gran vendedor también para Estados Unidos, de manera que en vez de pensar solamente en el sentido horizontal de Estados Unidos hacia Europa o hacia el Asia lejana, tiene que haber un cambio de perspectiva y priorizar el mercado latinoamericano”, declaró.
Mencionó también que durante su exposición pidió no caer en proteccionismos para afrontar la crisis internacional, ya que cerrar las fronteras sólo conduce a malograr los productos internos, elevar inflación y mermar la capacidad tecnológica de un país.
“Debemos trabajar en conjunto con Estados Unidos para ampliar el capital del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que es una gran posibilidad de impulso y crédito especialmente a la pequeña y micro empresa”, subrayó.
También indicó que Estados Unidos debe ver a los inmigrantes de América Latina no como una amenaza, sino como un aporte cerebral y de fuerza de trabajo.
“Me tocó decir adicionalmente que ya pasó la época en la cual el famoso bloqueo norteamericano a Cuba tenía algún sentido, ya eso pasó y es parte de una época de la bipolaridad con la Unión Soviética”, detalló.
Afirmó que dicho bloqueo no le ha dado ningún resultado a Estados Unidos en el intento de democratizar a la isla y por el contrario, “es el mejor argumento para que no haya una democratización integral dentro de Cuba”.
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