La Copa de Europa se colorea de naranja

Tenía que ser el color naranja, en tierras valencianas, el que se impusiera en esta edición. Marget Van der Graaf y Christel Boeljon, las más jóvenes de la competición, han rondado la primera plaza desde el principio. Vestidas para la ocasión, con los colores de su patria, algo más rosas en el caso de Marget, salían con dos golpes más que las francesas, líderes y con ganas de pelea.

Desde el principio se vio que Gwladys Nocera y Anne Lise Caudal no tenía el día. Aguantaron en el par mientras las holandesas ya les habían  cogido con birdie en el 3 y en el 5. De nuevo el hoyo 7 fue clave. El sábado las francesas se fueron al agua y en esta ocasión tiraron a green a asegurar pero lejos del hoyo, lo que les obligó a patear tres veces. Bogey, por birdie de sus rivales. Eso y el bogye francés del 6 distanció definitivamente a los dos equipos. Con el birdie de Francia y el bogey holandés en el 12, las cosas volvían a ponerse interesantes. Sin embargo Francia no estaba. Bogey en el 13 y en el 17 que provocaron que ya tiraran la toalla. De nada sirvió el birdie del 18. Holanda, por su parte, terminó birdie-birdie con -18 y puso la guinda a un torneo en el que desde el primer día se han destapado como la gran sorpresa. La naranaja mecánica toma el relevo a Inglaterra en esta segunda edición.

Por detrás, Australia se ha mantenido fuerte. Nikki Garret y Joanne Mills, con una tarjerta de 71 golpes, alcanzan con -14 la segunda posición junto con Francia e Italia, quese ha desmarcado con un vueltón de 62 golpes (-10), para acabar también con -14.

Inglaterra, con Laura Davies y Lisa Hall, no han podido revalidar el título y se han conformado con la quinta posición. -13 para las británicas que al final han apretado los dientes. 66 golpes que le sirven para alcanzar el top 5.

Les sigue España que mejoran el séptimo puesto del año pasado. Paula Martí y tania Elósegui salían con ganas de mejorar posiciones y lo han logrado. Su tarjeta de 68 golpes, con cinco birdies y un bogey les han dejado un buen sabor de boca también de cara a los próximos torneos del Circuito Europeo.

Destacada ha sido también la actuación de las americanas Beth Daniel y Meg Mallon. Las capitanas de la próxima Ryder han disfrutado de esta competición a la que han sido invitadas y se ha notado que han jugado sin presión. Con sonrisas, bromas y comentarios, las estadounidenses se van muy contentas de haber participado en la European Nations Cup aunque al final hayan descendido al séptimo puesto después de un día en el par.

En la entrega de premios, la organización echó el resto, con una puesta en escena digna de un campeonato de Europa y en el que se ha puesto punto final a un torneo volcado hacia las jugadoras. En dos ediciones ya ha alcanzado mucho prestigio en el viejo continente y desde la organización se ha confirmado el acuerdo de continuar los próximos dos años.