Dentro de las declaraciones,
Correa expresó que él jamás ha recibido dinero de las FARC y que tal denuncia no es más que una malévola acusación del presidente
Uribe, como parte de un plan para desestabilizar los gobiernos progresistas de la región.
De esta forma, en nuevas manifestaciones, el mandatario ecuatoriano advirtió al grupo guerrillero que si pretenden ingresar a su país la fuerza pública actuará, reiteró que
"jamás" recibió dinero de esa organización ni envió emisarios a conversar con ella y aseguró estar
"hasta la coronilla" de que se le intente involucrar con grupos irregulares.
Además, en su informe semanal de labores,
Correa agregó:
"Pido a las FARC, si a alguien dieron aportes, se los pido, digan el nombre porque los estafaron", e insistió en que ni como movimiento oficialista, Alianza País, ni como Gobierno ha recibido
"jamás" dinero de las FARC,
"ni jamás hubiera permitido" que se reciba.
Asimismo, pidió que si alguien ha contactado con las FARC asegurando que iban en su nombre, que lo digan
"porque señores de las FARC, los volvieron a engañar: yo jamás he enviado un emisario a hablar con ustedes y jamás lo enviaré".
Correa volvió a reiterar su señalamiento al presidente de Colombia,
Álvaro Uribe, para que ambos se sometan a un detector de mentiras
"a ver quién es el que tiene contactos con las FARC, el narcotráfico y los paramilitares".
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