Andalucía realiza con éxito el primer trasplante renal cruzado de España

Montero consideró en rueda de prensa en Granada que esta operación, en la que han participado una pareja andaluza y otra aragonesa, ha sido posible gracias a la excelencia de los profesionales que han trabajado "codo con codo" con los facultativos de Barcelona.

Recordó que Granada y el Hospital Virgen de las Nieves tienen una larga historia de trasplante, de hecho en este centro se realizó en 1978 el primer trasplante de donante vivo "y que se ha convertido en el órgano funcionante más antiguo de la comunidad autónoma".

Dijo además sentirse "orgullosa una vez más" de la sanidad pública andaluza tras este éxito, que a su juicio obedece a una estrategia mantenida en el tiempo y que ha dado lugar "a una confluencia de profesionales que están trabajando al servicio de los ciudadanos".

Calidad de vida

Montero explicó que esta operación ha permitido mejorar la calidad de vida de dos mujeres de 45 años que estaban a punto de necesitar la terapia de diálisis y cuyos maridos se prestaron a donarles sus respectivos riñones, si bien las pruebas médicas determinaron que no eran compatibles.

Así, las dos parejas de donantes-receptores decidieron entrar a formar parte del Programa de Donación Renal Cruzada, que permite el intercambio de órganos entre personas de todo el país para favorecer la compatibilidad de los trasplantes.

La operación

En el caso del hospital granadino se ha realizado el procedimiento completo que ha permitido que una mujer de 45 años de Jaén que presentaba una insuficiencia renal avanzada y se encontraba en situación de prediálisis cuente con un nuevo órgano compatible que procede de un donante natural de Huesca y procedente del Hospital de Barcelona.

Tanto la extracción del órgano, que se realiza mediante laparoscopia, como el trasplante se realizaron el pasado 21 de julio, en el marco de una compleja operación que requiere una largo proceso de formación y aprendizaje por parte de los facultativos, tal y como explicó el jefe de la sección de Urología del Hospital Virgen de las Nieves, el doctor Eduardo Espejo.

Este proceso se prolongó durante casi cuatro horas y media --lo habitual son dos-- y fue más complejo de lo normal porque el riñón extraído tenía una vena y una arteria doble que dificultaba la extracción.

Por su parte, la operación para implantar el órgano al receptor se prolongó durante unas tres horas frente a las dos horas y media que suele durar esta tipo de trasplante.

El riñón trasplantado comenzó a funcionar de inmediato y la función renal, previamente deteriorada, se normalizó en 48 horas, "lo que ha supuesto un éxito importante para el equipo sanitario", añadió la consejera.

El donante fue dado del alta el lunes, y la receptora, este martes, tras siete días de hospitalización y sin que hubieran surgido complicaciones médicas ni operatorias después de las intervenciones quirúrgicas.