Está circulando profusamente por los correos electrónicos una supuesta información sobre el coste al erario público de la familia Ortiz-Rocasolano que no es más que una burda intoxicación, según confirman a diario e-xclusivo fuentes de la propia Casa Real.
Según los datos que se ofrecen en esa intoxicación, la hermana de la Princesa de Asturias recientemente fallecida, Erika, tenía asignada una cantidad de 8.500 euros mensuales, “adjudicados en los P.G.E.. sección 153.3.4.-Casa Real (apartado gastos compesentariorios [sic] de la casa de S.A.R. el Príncipe de Asturias)”.
Bien, pues resulta que esa partida aludida ni siquiera existe en los Presupuestos Generales del Estado; es decir, que la ‘información’ parece ser más falsa que los euros de madera. Y, por ende, el resto de los ‘datos’ que se ofrecen en la mencionada ‘nota’.
Lo contamos así aquí, añadiendo el desmentido de la Casa Real, conocedora de esta ‘nota’ que ha sido profusamente enviada, casi urbi et orbe. Fuentes de la Casa Real nos han desmentido la mayoría de los datos, salvo, quizá, los relativos a las escoltas. Pero, obviamente, se trata de personalidades que precisan de protección ante posibles atentados.
Si (
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