www.diariocritico.com

¿Estamos locos o qué?

'¡¡¡Apártate de mí, pecadora!!!

"¡¡¡Apártate de mí, pecadora!!!

lunes 07 de septiembre de 2009, 11:50h

A punto he estado esta mañana de escribir sobre cómo el lince ibérico se aparea ahora en la autovía. Pero he pensado que tan apasionante tema lo voy a dejar para otro momento (no es coña, lo he leído en un digital aunque ahora no recuerdo cuál). El caso es que leyendo lo que nos cuenta la prensa hoy ni siquiera el tirón mediático de Jiménez Losantos y su tan esperado debut en esradio, me han apartado del notición que The Telegraph publica: un estudio revela que los hombre bajan su rendimiento intelectual en presencia de mujeres que consideren atractivas. Pues han descubierto América.

Ya sospechaba yo que la sangre en el hombre fluye de diferente manera que en la mujer. Y si está dando vigor a otra parte del cuerpo, no llega al cerebro. Está claro que si se aloja en el corazón, no sube más allá. Dice el mismo estudio que eso no nos pasa a las mujeres. Si es que somos de prácticas. Así, por ejemplo, somos capaces de freír un huevo mientras hablamos por teléfono y le contestamos al enano de turno cuál es la capital de Etiopía. Somos unas “fenómenos”, lástima que no se hayan dado cuenta antes

Los que han llevado a cabo este estudio son psicólogos de la Universidad Radbound de los Países Bajos e imagino que lo han hecho, entre otras cosas, porque tienen mucho tiempo libre, porque esto ya lo sabía yo sin hacer ningún estudio. Los investigadores concluyeron que se debía a que estaban tan absortos en causar buena impresión que absorbieron muchos de sus "recursos cognitivos”. Yo lo diría de otra manera pero voy a dejarles a ustedes que ejerciten la imaginación porque corro el riesgo de parecer una ordinaria si pongo por escrito cómo traduciría yo esto al román paladino.

Pues mujeres del mundo, a por ellos. Ya saben, si quieren noquear a un hombre, dejen ustedes fluir lo que comúnmente se ha venido denominando armas de mujer; caída de ojos de las de cine, escotes y unas buenas piernas. Si es que somos unas pecadoras impenitentes, y ya desde Eva. Mira que somos malas pécoras. No en vano la literatura está llena de ejemplos femeninos que volvieron loco a más de uno. Pues eso, me voy a poner un poco de rímel, a ver si encuentro a algún incauto por ahí.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios