El PNV pone a Zapatero en un brete exigiendo que suprima una vicepresidencia y dos ministerios

El diputado José Ramón Beloki, autor de la iniciativa,  la ha justificado asegurando que en estos tiempos de crisis es necesario reducir la estructura del Gobierno como ejemplo de”sobriedad y rigor”, dejando solo dos vicepresidencia, frente a las tres que hay ahora, y 14 ministros en lugar de los 17 actuales. La vicepresidencia que no les gusta a los nacionalistas vascos es la tercera, que se creó para Manuel Chaves, la de Cooperación Territorial. Y los dos ministerios que ‘sobran’, a su juicio, son el de Vivienda y el de Cultura.

Hay que señalar que dos mociones similares ya fueron debatidas por el pleno del Congreso hace unos meses y lograron aprobarse. La primera tuvo lugar el 28 de abril, pocas semanas después de las elecciones vascas, y fue presentada también por el PNV En ella se instaba al Gobierno a suprimir al menos un ministerio en 2010. Dos meses después – el 16 de junio- , los socialistas perdieron también otra moción, esta vez de ERC, en la que los republicanos pedían la supresión de los ministerios de Cultura, Vivienda e Igualdad.

Pero las mociones solo ‘instan’ al Gobierno a tomar nota de los requerimientos aprobados por la Cámara, no le obligan a ejecutarlos.  No así las proposiciones de ley, que si salen adelante con el apoyo de la mayoría de la Cámara deben continuar el trámite parlamentario habitual.


El primer paso de una larga tramitación

Así, el de esta tarde no es más que el primer paso para que se admita a trámite la reforma  ley de Organización, Competencia y Funcionamiento del Gobierno y se cambie lo dispuesto en su artículo primero que en su redacción actual no establece un número concreto de carteras dejando en manos del Presidente la decisión. Pero, si la proposición se aprueba, entonces deberá pasar a discusión en Ponencia, ir después a la Comisión Constitucional, -en donde se negocian las enmiendas de los grupos-, volver al pleno, luego al Senado y, si hay nuevas modificaciones en la Cámara Alta, regresar al Congreso para su aprobación definitiva. Todo un largo proceso que bien podrá alargarse en el tiempo.

El PSOE, en último extremo, lo único que podría hacer es conseguir, a través de una enmienda, que la reforma no entre en vigor en esta legislatura, es decir, que no se tenga que aplicar con ‘efectos retroactivos’.

Convencidos de que también esta vez van a ver aprobada su propuesta, los peneuvistas han estado recabando apoyos estos días de los demás grupos del Congreso. Y todo apunta que lo van a tener al menos del PP y de ERC, mientras CiU – que apoyaron las anteriores mociones- se lo piensa y no descarta abstenerse. 

Ante la previsible derrota, el portavoz socialista, José Antonio Alonso, intenta desesperadamente que el PNV se retracte y retire ‘in extremis’ su propuesta. No hay que olvidar que en el País Vasco están a punto de cerrar un acuerdo de “estabilidad presupuestaria” que afecta a todas las diputaciones provinciales y a otras instituciones vascas.