Esta candidatura derrotó en la votación a las otras dos que se presentaban, la también conjunta de Croacia y Hungría y la de Italia, según anunció el presidente de la UEFA, Michel Platini, en el Ayuntamiento de Cardiff.
Para su decisión, la UEFA tuvo en cuenta criterios como el transporte, infraestructuras, condiciones legales, alojamiento y seguridad. Para los partidos, las sedes polacas serán Gdansk, Poznan, Varsovia, Wroclaw, mientras que Dnipropetrovsk, Donetsk, Kiev y Lvov albergarán los partidos en Ucrania.
Ninguno de los dos países albergó nunca una gran fase final, aunque ambos tienen gran tradición futbolística, ya que Polonia fue tercera en los Mundiales de 1974 y 1982, mientras que los futbolistas ucranianos participaron con la selección de la URSS cuando conquistaron la primera Eurocopa en 1960. Desde su excisión ha ido labrándose un nombre en el panorama futbolístico.
La decisión fue algo sorprendente, ya que Italia, vigente campeona del Mundo, partía como gran favorita, aunque quizá le han perjudicado los escándalos que sacudieron al fútbol transalpino la pasada temporada. Incluso Croacia y Hungría parecían tener mayores opciones, pero no lo han conseguido, para alegría de los vencedores.
"Finalmente, el gran acontecimiento va a irse a países que no han tenido oportunidades para mejorar", expresó el presidente de la Federación de Polonia, Michal Listkiewicz. "Esto será un hito en la historia de dos naciones eslavas", valoró. "Os invito a todos a un acontecimiento que irá al Este, finalmente tenemos esta oportunidad. Haremos todo lo que hemos prometido", comentó.
El delantero ucraniano del Chelsea, Andrei Shevchenko, y el portero polaco del Liverpool, Jerzy Dudek, apoyaron la candidatura de sus países, aunque para entonces es muy poco probable que puedan competir en la gran cita.
La apuesta por naciones con menor relevancia europea para que mejoren sus infraestructuras y se sumen a la principal escena internacional parece que sigue siendo el argumento más sólido en las elecciones, para disgusto de los italianos, que recibieron con las lágrimas de la ministra de Deportes, Giovanna Melandri, la noticia.
Antes de anunciar su decisión, Platini quiso tener un "recuerdo afectuoso para Maradona que está atravesando un momento difícil, en nombre de toda la familia del fútbol", dijo antes de confirmar el nombre del ganador.
"Son los vencedores, pero no hay perdedores, sólo candidaturas que no han podido ganar. No puedo decir nada más que cosas buenas de todo el esfuerzo que se ha realizado y toda la pasión por el fútbol que hemos visto en las tres", valoró.
Ucrania: "Ahora somos de verdad independientes"
La candidatura vencedora se impuso en la primera votación, al recibir ocho votos, uno más de los necesarios para conseguir la mayoría absoluta (la mitad más uno), mientras que Italia recibió los otros cuatro.
Los representantes de Italia y Ucrania en el ejecutivo de UEFA, Franco Carraro y Grigoriy Surkis, respectivamente, no participaron en la votación, pero Surkis no tardó en mostrar su alegría. "Ahora somos de verdad independientes, esta confianza de la UEFA lo confirma", aseguró.
"Es una gran oportunidad y debemos demostrar que nos la merecemos. En los últimos tres años hemos puesto el corazón, todo el empeño para conseguir este objetivo y es un nuevo reto que afrontaremos con gran emoción", señaló el presidente de la Federación ucraniana, que reconoció "muy difícil describir las emociones" que estaba viviendo.
"Estoy abrumado. En estos tres años hemos puesto todo nuestro corazón en esto. Es una oportunidad fantástica que se nos brinda y haremos lo posible por demostrar que la merecíamos", sentenció Surkis.
Si (
No(
