Políticos y agentes económicos y sociales se mostraron escépticos ante el anteproyecto aprobado por el Consejo de Ministros. Para el presidente del PP,
Mariano Rajoy, la nueva ley es la consecuencia de “una cadena de anuncios” que nunca terminan y una medida que “sólo empeora las cosas”. Con anterioridad, el portavoz económico del PP,
Cristóbal Montoro, señaló que es “de la época franquista” intentar buscar sectores productivos “campeones”.
El coordinador general de IU,
Cayo Lara, calificó de “humo” y puso “en cuarentena” el anteproyecto de ley. Denunció que existe una “profunda contradicción” para que se pongan en pie los principios de esa ley, puesto que los Presupuestos para 2010 no incluyen partidas económicas que la respalden.
Los sindicatos CCOO y UGT consideraron que en la ley no se reflejan “suficientemente” los temas referidos a la calidad en el empleo y a que exista un auténtico marco industrial que permita el cambio de modelo productivo. Salgado se reunió en la tarde de ayer con los secretarios generales de ambos sindicatos.
El anteproyecto de ley de Economía Sostenible aprobado por el Consejo de Ministros aparece como información de apertura en la mayoría de los diarios.
Según EL PAÍS, “el Gobierno deja de lado las grandes reformas”. EL MUNDO destaca la falta de concreción de la norma: “Sin reformas, sin datos, sin empleo”. Para ABC, la ley de Economía Sostenible es “un cajón de sastre que no aborda reformas esenciales”.
EL ECONOMISTA habla de “cajón ‘desastre’”. CINCO DÍAS resalta la “lluvia de medidas económicas pero sin reformas de calado”. En esta línea, LA VANGUARDIA dice que el plan es “vago y no fija prioridades”.
LA RAZÓN define la ley: “Ni frío ni calor”. Por último, PÚBLICO alude a las “ventajas fiscales par impulsar la economía” y EL PERIÓDICO dice que “cambian decenas de leyes para facilitar la vida de las empresas”.
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