Los directivos del Grupo Marsans brillan por su ausencia

Casanova explicó que “como autoridad de aplicación” tienen la tarea de controlar el trabajo de las agencias de viaje, y que en el caso de Marsans, “por más que sea del grupo español, legalmente está constituida como una empresa argentina” y ante la situación de “insolvencia o precariedad económica como lo indica el artículo dos, se abrió un expediente administrativo a la compañía”

Lo que más le llama la atención al funcionario argentino, es la falta de respuesta de los directores de la empresa, que, desde que cambió el directorio en noviembre del 2009, tuvieron otra actitud, “comenzando los inconvenientes”. Desde ese entonces la falta de comunicación fue notable y el pedido de balance realizado por las autoridades nunca tuvo eco dentro de los directivos de la empresa.

Uno de los requisitos que no está cumpliendo la agencia de viajes es el de tener un fondo de garantía, algo que se le exige a todas las agencias,  por lo que se los intimó en el plazo de los próximos treinta días a realizarlo o, de lo contrario, se le quitaría la licencia para poder operar en el país.

 Otros problemas que presenta Marsans en el país se encuentra la emisión de cheques sin fondos, falta de pago a los empleados y tres pedidos de quiebra a la Justicia de parte de acreedores de la agencia de viajes.

A pesar de las versiones que indican que en la empresa trabajan cincuenta empleados, diversas fuentes consultadas creen que por las operaciones y oficinas con las que cuenta el grupo en el país, la cifra de trabajadores sería bastante menor,

El director de Gestión de Calidad Turística cree que si hubiera “voluntad e interés” este conflicto se podría “cambiar en 24hs”, e insistió que le “llama la atención el porque dejaron que se llegara a esta situación” 

Casanova es conciente que esto es “la punta de un iceberg de algo más complejo” aunque aseguró que desde su organismo lo que les interesa controlar es “si la agencia de viajes está en regla o no” más allá de cualquier conflicto que pueda tener el Grupo Marsans con el gobierno argentino por el tema de la expropiación de Aerolíneas Argentinas.

Sobre los pasajes vendidos, Casanovas le informó a este medio que son un “alrededor de 500” , una cifra que no es volumen para lo que debería operar una agencia de la trascendencia de Marsans, por lo que se cree que hubo una decisión estratégica de dejar de vender paquetes de viajes.
Por el momento no hay denuncias presentadas a nivel individual, pero sí de una agencia minorista que hasta ahora solo quedó en una queja informal.

La apertura del expediente se concretó en momentos en que se encuentra en proceso de expropiación al grupo español Aerolíneas Argentinas, administrada por el Estado desde julio de 2008.

El Grupo Marsans, también es dueño de la desaparecida Air Comet, y el Gobierno argentino habían firmado un acuerdo para la venta al Estado de la compañía, pero la operación fracasó y el Ejecutivo de Cristina Fernández acudió entonces al Congreso, que avaló una expropiación que deberá concretarse tras un juicio sumario iniciado en 2009.

Para Pérez Tamayo el “fin de Air Comet era algo previsible” 
El secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Jorge Pérez Tamayo, calificó de "previsible" al cierre de la empresa aerocomercial española Air Comet.

Pérez Tamayo, en dialogo con Télam, dijo que sus propietarios, el grupo español Marsans, en el pasado "sacaba fondos de Aerolíneas Argentinas para financiar" a esa compañía.

"Air Comet se llevaba fondos de Aerolíneas y cuando se les cortó esa posibilidad tuvieron que cerrarla", enfatizó el titular de APLA.

Pérez Tamayo dijo que si el Gobierno nacional no hubiera tomado cartas en el asunto, Aerolíneas Argentinas "hubiera tenido el mismo fin de Air Comet".

"Ahora no van a poder decir que los culpables somos nosotros", afirmó el dirigente sindical, en referencia a los dichos del Grupo Marsans, que en su momento responsabilizó a los gremios Argentinas de su fracaso al frente de la empresa