Los bancos, accionistas mayoritarios de Repsol

Ha llegado la hora de llamar las cosas por su nombre. Sacyr, la constructora, no es la propietaria del 20,01% de las acciones de Repsol, por mucho que nos engañe su presidente, Luis del Rivero. Son los bancos acreedores de la endeudada hasta las trancas Sacyr los verdaderos dueños de ese 20%. Y, desgraciadamente éstos no dicen nada del enfrentamiento de su deudor con el presidente de Repsol, Antoni Brufau..

Aunque a algunos les suene la "operación Sacyr en Repsol" como algo parecido a aquella aventura medio política medio especulativa que llevó a Del Rivero a hacerse con el 3% del BBVA para echar a Francisco González, lo cierto es que ésta es totalmente diferente. Del Rivero no tiene  inquina personal contra Brufau como se quiere hacer ver. Lo que quiere es que se le dé mas pasta para poder hacer frente a la enorme deuda que tiene, y que pignora y condiciona, por lo tanto, las acciones de Repsol. Y, para obtener mas pasta de la que se saque por los beneficios anuales sólo existe una fórmula: vender activos. Es decir, obtener los tan temidos,contablemente hablando, "beneficios atípicos", pan para hoy, hambre para mañana.

Repsol tiene activos suficientes como para darle el dinero a Del Rivero que necesita. Sólo los proyectos en Latinoamérica en los cuales se  están descubriendo cada día  nuevas cuencas petrolíferas, permiten asegurar el futuro, no sólo de los trabajadores de Repsol, sino también el de sus hijos, nietos, biznietos y alguna generación más. ¿O es que Del Rivero es tan corto de miras que todavía no se ha dado cuenta de que Brasil se está convirtiendo en el líder económico gracias al descubrimiento de los yacimientos petrolíferos enfrente de sus costas atlánticas?

En esos proyectos, Repsol está asociado con Petrobras. En otros descubrimientos, esta vez gasísticos, como algunos en zonas tan dispares como el Mar del Norte o Perú,  la rentabilidad puede llegar, incluso, a ser mayor. Y no olvidemos que Repsol es principal accionista de Gas Natural, lo cual convierte esta estrategia de prospecciones en la más adecuada para asegurar el futuro de las dos compañías de energías no renovables más importantes, no sólo de España, sino incluso de Europa.

A Sacyr, si no le conviene esta política le queda una alternativa: vender ese 20,01%. Pero, ojo con quien se juega los cuartos un personaje de sobra conocido como Luis del Rivero. No vaya a ser que nos meta a algún mafioso que otro, que en el sector petrolero y gasístico los hay, y a puñados.

No olvidemos que Repsol es una compañía estratégica para España y que existen mecanismos legales como para impedir que Del Rivero, que, como bien se ha dicho aquí, en muchas ocasiones, va tan acelerado que luego es incapaz de frenar, cometa un error del que, posteriormente, nos arrepintamos todos, incluidos los españoles de a pié