Problemas en la coordinación de la Presidencia de la UE

Se quejan en el Gobierno de descoordinación en la Presidencia española de la UE. Es decir, que la Alta Representación dirigida por Nicolás Martínez Fresno no ha cumplido con las expectativas desatadas y que el trabajo es tan abrumador que ha desbordado por completo a este organismo. De hecho, diversos Ministerios han tenido que ir asumiendo uno por uno gran parte de la burocracia necesaria para establecer las citas de alto nivel de sus respectivos departamentos.

Como se sabe, ya el 18 de abril de 2008 el Gobierno, previendo el trabajo agotador que conllevaría la Presidencia de la UE nombró a Martínez Fresno como Alto Representante para las labores del primer semestre del 2010 y otras reuniones de alto nivel. La Alta Representación fue creciendo y en un momento dado se arrogó para sí incluso las notas de prensa relativas a esa Presidencia, de tal manera que los Ministerios no tenían autonomía ni para la emisión de esos comunicados si antes no eran visados por la Alta Representación.

Sin embargo, el trabajo de coordinar todas y cada una de las acciones y reuniones previstas eran tan arduos -interviene desde las agendas de trabajo de los participantes hasta alojamientos, desplazamientos, salones… e incluso, desde luego, la seguridad- que la oficina se ha visto auténticamente desbordada. Ahora son los propios departamentos los que tienen que realizan una ingente labor -completa en unos casos, complementaria en otros- para llevar a cabo la cantidad de citas y actos que se han programado… y se siguen programando.

Desde parcelas gubernamentales se critica, por tanto, la labor de esa oficina, pero sobre todo, a decir verdad, es más bien una crítica en cierta forma 'insana', ya que no se ha conseguido el efecto publicitario que se esperaba para esta Presidencia.

Y en ese repartir culpas sobre no responder a expectativas más o menos publicitarias, algunos incluyen también a Bernardino León, secretario general de la Presidencia en sustitución, precisamente, de Martínez Fresno. Algunos quieren culpar a León de lo que consideran el 'fracaso de Davos', cuando sentaron a Zapatero al nivel de Grecia.

En fin, que en todo caso en el Gobierno no hay mucho 'engrase'.