¡Que vienen los chinos prestamistas!

La leyenda urbana dice que los chinos han ‘invadido’ España con restaurantes y tiendas chinas primero, y después con la ocupación, vía compra, de todos los locales y naves de polígonos industriales. Pero además ahora resulta que son los dueños de nuestros préstamos nacionales: los últimos datos del Tesoro Público muestran que los extranjeros posen el 45% de la deuda nacional, 202.500 millones de euros, al cierre de 2009. El mayor acreedor sigue siendo Francia, con el 25%, que mantiene estos niveles desde que España acudiera a los mercados exteriores para financiarse. Le sigue Asia, con un creciente protagonismo de China, espectacular en su crecimiento exponencial: en 2000 solamente poseía el 2% del total de en manos extranjeras, mientras que en 2009 se situó ya en el 18%. Benelux acumula el 15% de la deuda pública española en manos de no residentes, y figura en tercera posición. En paralelo, Alemania ha ido diluyendo su protagonismo, del 12% que tenía en el año 2000 ha bajado al 7% en 2009. En casi una década, la inversión de los alemanes en deuda pública española ha caído cinco puntos porcentuales y se ha colocado en el quinto puesto.

Pero no todo va a ser invasión por parte de los chinos: España hace sus pinitos empresariales en este inmenso país en el que es muy difícil hacer negocios si no se entra de la mano de un inversor local de confianza. El último ejemplo es el vehículo de inversión Chongqing Real Estate, constituido por  un grupo de family office (inversores privados madrieños y catalanes), para participar en el desarrollo de viviendas en China. Para elo, la sociedad se ha aliado con la empresas Quantum Property Chongqing, con sede en China, que está controlada por los empresarios José Cremades, David Vilallonga y la familia Sans.