Más que algo, mucho tiene que ver la caída espectacular del PSOE en las encuestas y, sobre todo, de
Zapatero en valoración de líderes, pero lo cierto es que los estrategas monclovitas han dispuesto que el Gobierno en pleno pase a la acción en una auténtica ofensiva gubernamental… empezando por el presidente del Gobierno.
La decisión se ha tomado después de que en Moncloa se viera con estupor cómo Rajoy, tras despreciar una rueda de prensa conjunta con Zapatero tras la reunión de ambos, se postulara desde el atril de la Portavocía del Gobierno como sustituto de Zapatero, aunque eso sí, "cuando los españoles quieran". Ahora de lo que se trata es de contrarrestar la campaña del PP, cuya estrategia pasa por pedir elecciones anticipadas, presentando a un Zapatero triunfante con una economía que 'repunta'.
De momento, Zapatero será el domingo, junto con el lehendakari Patxi López, la estrella de la tradicional Fiesta de la Rosa que los socialistas vascos celebrarán en Barakaldo. Se espera algún mensaje de ZP en lo relativo a los movimientos que se detectan en el mundo abertzale de izquierdas.
Y la semana que viene, el miércoles para más señas, Zapatero comparecerá a petición propia en el Congreso de los Diputados para explicar los 'brotes verdes' de la economía española y, sobre todo, para denunciar los ataques especulativos que algunos tiburones financieros han lanzado contra España, haciendo caer la bolsa.
Esa comparecencia era inevitable, ya que la iban a pedir varios grupos políticos, pero el Gobierno se ha adelantado porque, así, Zapatero podrá lucirse con el crecimiento del 0,1 % del PIB y, sobre todo, con lo que se hablará en la reunión del Eurogrupo de este viernes, donde se esperan algunas medidas interesantes.
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