Sindicalista denuncia persecución del Gobierno
jueves 13 de mayo de 2010, 23:58h
Freddy Contreras, presidente de la Organización No Gubernamental (ONG) Ayudaltax, decidió coser sus labios, no ingerir alimentos y amarrarse a un semáforo de Bogotá en protesta por las amenazas de muerte que dice haber recibido del Gobierno y la Policía, por reivindicar los derechos de sus compañeros.
Contreras, que lleva 40 horas en huelga de hambre y 20 encadenado, asegura que por denunciar el intrusismo en el gremio de taxistas ha recibido amenazas por parte de la Policía, además del Gobierno, que permite las prácticas ilegales pese a conocer las condiciones en las que se encuentran los taxistas.
"La Policía me tiene amenazado, si yo trabajo me inmovilizan los carros que maneje, y a mí me envían a la Unidad de Policía Judicial (UPJ), como si fuera cualquier delincuente. No puedo hablar, no me dejan hablar, he mandado cartas y nadie me para bolas; por eso me he visto obligado a esto, a las medidas de hecho", sostuvo Contreras.
Contreras y Ayudaltax, ONG que lucha en defensa de los derechos de los taxistas y organiza los paros y las reivindicaciones, afirmó que el suyo es un caso de persecución política, porque en Colombia "los sindicalistas están condenados a morir o a que los saquen del país".
"Llevo cuatro años protestando, pero aquí nadie puede protestar porque lo meten preso, lo detienen o le montan un 'falso positivo'", sostuvo el presidente de Ayudaltax, y apuntó: "la policía me dice que si trabajo entonces me meten detenido y los demás gremios me dicen que si protesto por los derechos de mis compañeros me van a matar".
Contreras aseguró que en Bogotá existen muchos taxis ilegales, camionetas y 'bicitaxis' que trabajan sin licencia, pero con los que el Gobierno se muestra permisivo. "Que el gobierno reconozca que se equivocó, eso es lo que pido", agregó el presidente de Ayudaltax.