“A mi madre diariamente la amenazan la agreden verbalmente le aseguran que su sangre correrá por los pisos del recinto, le intentan agredir con chuzos que son cuchillos o armas construidos por las reclusas y hasta le arrojan gasolina amenazándola con quemarla viva”, señaló.
Geraldine Afiuni dice que la directora del Inof no permite que la jueza salga de la celda a ninguna hora del día para evitar agresiones de otras reclusas. Sostiene que en Venezuela las cárceles parecen campos de concentración.
“Recientemente se celebro una audiencia preliminar, es decir, un juicio donde los fiscales afirmaron que no había pago ni promesa de pago, lo que prácticamente indica que ella es inocente del delito de corrupción ya que corrupción sin dinero es como homicidio sin muerte”, indicó.
Trascendió que la relatora de derechos humanos de la ONU llevaría el caso hasta sus últimas consecuencias pues sostienen que una jueza no puede estar detenida por cumplir un dictamen del grupo de trabajo de las detenciones arbitrarias de Naciones Unidas donde se establecía que debían otorgarle una medida cautelar al empresario Eligio Cedeño.