Votar por ANV

Como era de suponer, al Partido Popular le ha cogido fuerte eso de ver a Pernando Barrena, uno de los voceros de la ilegalizada Batasuna, exhibiendo una papeleta electoral con una candidatura de Acción Nacionalista Vasca. Los gritos, alaridos, trenos y plantos de los populares no llegaban a la afinación coral del prestigioso Orfeón Donostiarra, pero sin duda alguna le sobrepasaban en fuerza. Al citado orfeón y a veinte más como él, claro.

Ni siquiera las sucesivas sentencias del Tribunal Supremo y del Constitucional han conseguido aplacar a la derecha opositora. El PSOE es responsable, no ya que de que, a título individual los se supone que miembros de la ilegalizada Batasuna, puedan ejercer su derecho de sufragio activo y pasivo, sino de que estos respiren y de que sigan desarrollando sus funciones fisiológicas. El PP está por la desaparición de militantes y votantes de Batasuna. Y no es –ojalá lo fuera—una caricatura o un exceso del columnista. Si los magistrados de ambos tribunales retorcieron la ley, como hizo el Gobierno, a través del Fiscal General y de la Abogacía del Estado, los populares no sólo hacen los mismos y temerarios juicios de intenciones, sino que los extienden, desde el presente, al pasado y al futuro. ¡Que Jaungoikoa –el Señor de lo Alto, Dios en euskara—nos coja confesados y con los calzones en su sitio!.

Nada, desde que a Batasuna se le aplicó lo previsto en la Ley de Partidos Políticos, hasta las dos sucesivas y recientes sentencias de ambos tribunales, dice que sus antiguos miembros no puedan manifestar públicamente –y con las intenciones que ellos quieran—sus preferencias electorales para estos comicios. La ilegalizada formación como tal no puede actuar, no así quienes, en su día fueron miembros de ella. En este aspecto, pues cómo si les da por ponerse a hacer ganchillo o punto de cruz, juntos o por separado, tejiendo el anagrama de ANV.

Que el numerito de ayer del tal Barrena iba por la senda de una nada inteligente provocación es de cajón. Bueno, ¿y qué?. ¿Ilegalizar las listas supervivientes de ANV? ¿Por qué? ¿Por qué lo dicen el PP y sus corifeos mediáticos? Seamos sensatos. Porque a Barrena –o a Permach o a Otegui—se les podría haber ocurrido, por ejemplo, exhibir las papeletas del PP para decir que esas iban a recibir sus votos. Y, entonces, alguien –quizá el Fiscal General del Estado—podría haber instado a la disolución de los apoyados por los pérfidos batasunos. Al menos es la tesis subyacente en la protesta del Partido Popular, tan apegado al retorcimiento de la Ley de Partidos Políticos. De haber tenido los batasunos esa perspicacia, pues como que el columnista, a lo mejor hasta les pagaba unos txikitos.