Dos días después del debate del Estado de la Nación que por primera vez perdió por la mínima
Zapatero, -según coinciden todos los medios de comunicación-, el líder socialista se presenta ante el máximo órgano entre congresos de su partido con la seguridad de que nadie le va a dar la espalda en estos duros momentos. De hecho, hasta ahora ha sabido aplacar todos los conatos de ‘rebelión’ que se han suscitados estos meses, incluso en el
PSC tras el varapalo sufrido en Cataluña con la sentencia del Estatut sobre la que ya hay planes para enmendarla.
El resultado de ese cierre de filas es que en el borrador de resolución que aprobará el Comité Federal los socialistas respaldarán el “severo plan de ajuste" aprobado por el Gobierno, desde la congelación de las pensiones y la bajada de sueldo a los funcionarios a la reciente reforma laboral que tanta controversia ha levantado.
Agradecimiento a la militancia
Los socialistas presumen de que allí donde gobiernan han sabido dar una "respuesta ejemplar" ante las dificultades. Pero en esta ocasión hace un ‘leve’ ejercicio de autocrítica y aseguran que "podemos cometer errores pero nunca, jamás, nos escondemos ante las dificultades", actitud que comparan con la del PP y su líder,
Mariano Rajoy, que no da la cara ante las crisis ni arrima el hombro.
En este sentido, Zapatero en su intervención, que comenzará sobre las diez de la mañana, agradecerá a los dirigentes y militantes ese ejercicio de “responsabilidad” pero pedirá que se redoblen los esfuerzos para explicar "en calles, en el barrio y en las agrupaciones" las duras medidas adoptadas por su Gobierno que defenderá con uñas y dientes destacando que otros países europeos también se han visto obligados a tomarlas.
Su discurso será muy similar al desgranado en el debate del estado de la Nación en el que reconoció lo que nada va a impedirle continuar adoptando los sacrificios que sean necesarios “por el bien” de España.
Optimista ante el futuro
No obstante, como es habitual en él, Zapatero se mostrará optimista ante el futuro y recalcará que hay "indicios de leve mejoría", y pedirá que se afronte el resto de la legislatura sin "pesimismo”. En este sentido restará importancia a las encuestas que actualmente son muy adversas para el PSOE ya que recordará que queda aún más de año y medio para marzo de 2012, fecha de las elecciones generales. Se espera que los dirigentes socialistas le darán aliento para que agote la legislatura, algo que ya ha hecho el ex presidente del Gobierno y ex secretario general del partido,
Felipe González, quien desde Santander sentenció que Zapatero "puede y debe acabar la legislatura".
Apoyo al Estatut
En la resolución que se aprobará este sábado el PSOE hay también alguna alusión al Estatut de Cataluña casi idénticos a la resolución que han presentado en el Congreso de los Diputados como consecuencia del Debate del estado de la Nación que se someterá a votación el próximo martes. Es decir, que el PSOE – y por ende el PSC- "acata" la sentencia del Constitucional pero entiende el "malestar" creado en Cataluña por lo que se impulsará el desarrollo del autogobierno “en el marco de una España plural".
El Comité Federal, además, aprobará el calendario del proceso de elección de candidatos para las elecciones municipales y autonómicas de la primavera de 2011, un proceso que servirá de pistoletazo de salida para la doble cita con las urnas. El PSOE, no obstante, retrasará hasta finales de septiembre o primeros de octubre, -una vez celebradas las elecciones catalanas- la proclamación de los cabeza de cartel de los principales plazas autonómicas y municipales. No se descarta que en algunos lugares haya primarias.