Ángel Pérez y su debate particular

En el debate electoral que enfrentó en TVE a los tres candidatos a la alcaldía, Pérez no entró en ninguno de los dos ataques que lanzó el candidato socialista al actual alcalde, no participó de las críticas al PP por la guerra de Irak ni por su actitud respecto al 11-M y tampoco dijo una palabra respecto a una supuesta relación de Ruiz-Gallardón con implicados en la Operación Malaya de Marbella. El candidato de IU se centró en Madrid -como viene haciendo en la campaña y como ya hizo en el anterior debate en Telemadrid-, en los "déficit" que el PP ha dejado en sus barrios y en sus promesas para recuperar "el bienestar perdido".

Comenzó su intervención con un "reproche" en torno a la M-30: "con los 5.000 millones que ha costado podrían haberse pagado dos veces los equipamientos de los barrios de Madrid, en los que se ha triplicado la deuda y se ha abandonado el bienestar". El "modelo de gestión" que el actual regidor asumió para esta infraestructura, continuó, "hace que sea imposible equipar socialmente a Madrid, a no ser que se privaticen todas las prestaciones sociales". Pérez contrastó su definición de "empleo" -"un trabajo que permite la integración de una persona en la sociedad"-, frente a la de Ruiz-Gallardón -"una ocupación para subsistir"- y dijo que, según su idea del empleo, en Madrid se han perdido 138.000 puestos en la industria en los últimos años y existe un 30 por ciento de trabajo temporal.

"La política de empleo", advirtió, "es cambiar empleo estable por temporal y gestionar los servicios públicos desde criterios de rentabilidad social, no de rentabilidad económica". Pérez se dirigió directamente "a los 'mileuristas' y a los 'menos mileuristas', a los que en esta ciudad se niega el derecho a una vivienda y a la emancipación", y les ofreció pisos construidos directamente por la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo a precio de coste y vivienda en alquiler "con rentas asequibles".

Anunció que creará una Concejalía de Mujer que desarrolle la Ley de Igualdad y que fomente y ayude a las empresas a flexibilizar horarios, a que la mujer y el hombre disfruten de su tiempo por igual, y que promoverá que el Consejo de la Mujer funcione como un órgano independiente. Y cuando Ruiz-Gallardón amenazó con que la alternativa al PP en Madrid es un bipartito PSOE-IU, Pérez advirtió de que "bipartidismo" es también "decir una cosa y hacer otra", como el PP, "que promete ahora lo que no ha hecho en cuatro años de gobierno".

En esta línea, aclaró que IU "se cree lo que propone". "Cambiar el gobierno no es nuestro objetivo básico", aseguró en referencia a una posible alianza con los socialistas, antes de añadir: "queremos cambiar la política y la sociedad, gestionar con otras prioridades, por eso les pido que voten a quien les represente y no en contra de sus intereses". Y es que, "en España", concluyó, "sobra crispación y falta política real, de la que nos afecta en el día a día, que es la más necesaria"