Blanco vuelve a hablar con ZP

En una entrevista concedida a Europa Press Televisión, el ministro José Blanco ha vuelto a hablar en nombre de su jefe, lo que prueba la confianza que les une y también su fuerte peso en el PSOE, donde el político gallego es vicesecretario general. Ha dicho ni más ni menos que lo que había anunciado en enero de este año: Zapatero será el candidato del PSOE en la primavera de 2012, si es que antes logra completar esta legislatura, de la que llevamos casi dos años y medio. Lo que sorprende más es que siga siendo Blanco quien reitera tal cosa y no el propio interesado, tantos meses después de que el 'número dos' del PSOE saliera a la palestra para frenar en plena cuesta de enero una campaña mediática del PP que cuestionaba la candidatura de ZP.

   ¿Por qué Blanco insiste de este modo con Zapatero? Tiene toda su lógica, tanto si va a ser el ganador, como el derrotado, que es la hipótesis más probable, siempre y cuando no se obre algún milagro económico que permita ver la crisis por el retrovisor durante la campaña para las elecciones de 2012. Si va a ser el ganador, la decisión no plantearía ninguna duda, parece obvio. Y si va a ser el perdedor, nadie se quemaría en la aventura: Zapatero se iría y con él toda una época del PSOE postfelipista. ¿Se marcharía también el propio Blanco o se convertiría en el Rubalcaba de quien venga detrás de ZP? ¿Sería incluso él aspirante a la sucesión al frente del PSOE? ¿O elegiría ese momento para volver a Galicia? ¿Quizá a la empresa privada?

   Lo dicho: es muy curioso que Blanco hable por ZP --"entiendo que el PSOE y Zapatero podrán volver a ganar porque, aunque han transcurrido seis años de Gobierno, hoy Zapatero sigue representando las reformas, el cambio y el futuro"--, en un asunto tan delicado y personal como su candidatura, y que en cambio se abstenga de hablar de sí mismo, cuando es evidente que el ministro está ahora mismo en boca de todo el mundo, dentro y fuera del PSOE, ya que en la práctica es la voz del Gobierno y del Partido Socialista, en un posible aperitivo de su ascenso a una vicepresidencia. Por ser, es incluso la referencia del PSOE en su comunidad, donde mantiene un pulso permanente con el conservador Núñez Feijóo, con quien rivaliza ante las cámaras incluso en la Ofrenda al Apóstol o en los toros de Pontevedra, que ya es decir.