Dinero de todos, dinero de unos y techo presupuestario

Dinero de todos. La propuesta más destacada de las conocidas hasta la fecha es la ofrecida por el señor Artur Mas. El líder de Convergencia pide un pacto fiscal entre los partidos catalanes para reclamar ante el Gobierno de España un concierto económico similar al de Navarra o El País Vasco- por cierto calificados hace pocos años como inconstitucionales por la formación nacionalista, pero esto ya se consideran vestigios del pasado.  Tan sólo plantear, el eterno debate de lo que Cataluña da y Cataluña recibe, ¡ Y a la, ya está montada! La insolidaridad de Cataluña manifestada por los políticos. Y digo políticos, porque en contraposición, los catalanes- no políticos- tienen una manera distinta de entender el Estado de las Autonomías.

La solidaridad e Cataluña va más allá de los propios dirigentes, me explico; si casi un 70 por ciento de los catalanes- según un estudio de la Universidad Pompeu Fabra- están a  favor de contribuir con la riqueza de Cataluña al progreso de las zonas más desfavorecidas de resto del país. ¿Entonces donde está el problema? Yo me pregunto si el 30 por cierto restante corresponde a la clase política, o si los políticos son la clase social menos solidaria de nuestro país o quizá, ¿saben algo que el resto de  mortales se nos escapa? El señor Puigcercós parece que sí, ya avisaba de las no contribuciones de los vecinos del sur a la hacienda pública.

Dinero de unos. Por otro lado, y seguimos hablando de presupuestos, en este caso personales. Estos días se han hecho públicos el patrimonio de los seis principales candidatos a la presidencia de la Generalitat. Comencemos por el -a día de hoy, por  aquello de guardar las formas- presidente Montilla, que no sé si tendrá despacho en al plaza Sant Jaume a partir del 28 de noviembre. Porque lo que de momento no tiene es casa en propiedad, ya que la titular es su señora esposa. ¡Ojo!, que el señor Montilla en pocos días se puede quedar sin casa y sin trabajo- terapia a la visita! Siguiente candidata: Alicia Sánchez Camacho  hace pública una gran hipoteca que asciende a  casi seiscientos mil euros. Gran piso y gran hipoteca, pero aún, señora Camacho hay que pagarlo- aunque el sueldo de senadora ayuda bastante. Por su parte, el líder de ERC Joan Puigcercós, sí que tiene pagada la suya, eso sí, de inferior cuantía que la de la líder del PP, pero eso también, esquivando el boom inmobiliario, lo compró y pago hace ya años- nuevamente el señor Puigcercos demuestra sus dotes de gran  visionario. Hablando de ERC, un inciso si me lo permiten, ¿ no echan de menos  a alguien en la campaña de la formación independentista? Les hablo del señor Carod Rovira que parece estar desaparecido en combate o quizá ha sido enviado a la fría estepa siberiana.

Volvamos a los que están “vivos políticamente”- se entiende. Por su parte el ecológico candidato de ICV Joan Herrera, fiel a sus ideas de rebajar la contaminación de las ciudades, pedalea en dos bicicletas- no a la vez-  de 500 euros cada una- que aunque caras, pedales hay que dar. Albert Rivera, el más joven,  con tan solo 31 años paga dos pisos- no está nada mal para alguien con tan poca vida laboral. Y por último el señor Artur Mas que ha sido el menos partidario de la publicación de estas cuentas, es por su parte,  el candidato que posee un mayor patrimonio. El líder de CIU ha manifestado que este gesto de publicación de patrimonio,  es una medida electoralista y denuncia que se ha visto obligado a ello. ¿Pero la transparencia no debe comenzar por uno mismo? Además, el líder nacionalista no tuvo reparos en abrir la intimidad de su casa a una revista del corazón- hace un mes aproximadamente- y sí que tiene reticencias en hacer públicos sus bienes. ¿Qué es más intimo la cuenta corriente o el salón de su casa?

Dinero de todos. Y para acabar este repaso político económico les planteo otra pregunta para la reflexión, aunque primero los datos.  El presupuesto para las campañas electorales cambia mucho de unas formaciones a otras. Les doy un par de ejemplos: el señor Mas ha confirmado que el presupuesto de sus campaña asciende a dos millones de euros, mientras que el partido de Albert Rivera ha destinado ciento ochenta mil euros a esta promoción- por cierto que esta formación ha desarrollado los  bonos retornables, que también serán financiados por los ciudadanos,  por su parte, la formación se ha comprometido a devolverles el dinero que hayan prestado al partido tras la campaña electoral.

Con este sistema de financiación ésta es una nueva vía de debate, reivindicar  un cambio en la Ley de Partidos en lo relativo a cómo se dotan de recursos económicos las formaciones políticas. Va mi primera propuesta. Un techo presupuestario. En la NBA los equipos tienen un presupuesto límite y de ahí tienen que hacer malabares para contrarrestar los grandes salarios con las fichas más menguadas de los novatos, y así evitar que quien más tenga siempre gane- como en la liga española.

¿Si todos tuvieran el mismo presupuesto para la campaña, las fuerzas se igualarían?