La Asociación Murciana de Consumidores y Usuarios (Consumur), integrada en Facua-Consumidores en Acción, ha informado que en lo que va de año las autoridades de Consumo han ordenado la retirada del mercado o prohibición de la importación de, al menos, ocho modelos de guirnaldas luminosas, utilizadas en estas fechas especialmente para adornar árboles de Navidad y belenes.
Los artículos han sido incluidos en la red de alerta de productos no alimentarios peligrosos que coordina el Instituto Nacional del Consumo (INC). Hasta hoy, las guirnaldas con orden de retirada del mercado o prohibición de su importación que aparecen en la web del INC son ocho.
La Asociación muestra su preocupación por la facilidad con la que entran en España estos productos peligrosos, ya sea por las aduanas o desde otro Estado miembro de la UE, por lo que considera necesario que refuercen los controles tanto para evitarlo como para localizarlos y retirarlos del mercado.
En años anteriores fueron muchos más los modelos de guirnaldas peligrosas detectados por las autoridades de Consumo. El año pasado fueron 24, en 2008 otros 28 y en 2007 un total de 35.
Entre los motivos de los riesgos, cables con grosor inferior al requerido por la normativa europea, falta de protección contra la humedad, ausencia de suficiente resistencia mecánica o conexiones inadecuadas.
El incumplimiento de la normativa en la fabricación y etiquetado de estos productos implica riesgos de incendio, choque eléctrico, quemaduras y lesiones. La asociación recuerda que estos artículos son utilizados habitualmente por los niños, suelen estar encendidos muchas horas y, generalmente, sin vigilancia.
Un reciente estudio elaborado por la Comisión Europea indica que el 30 por ciento de las luces navideñas que se comercializan en la UE son peligrosas por el riesgo de incendios o de descargas eléctricas.
RECOMENDACIONES
Las guirnaldas deben identificar en su etiquetado a la empresa responsable de su venta en la UE e incluir en castellano una serie de advertencias de seguridad.
La Asociación ofrece una serie de consejos en relación al uso de guirnaldas, como la sustitución de las lámparas que fallen por otros de la misma potencia nominal. Sin embargo, estas no deben quitarse ni insertarse lámparas mientras la guirnalda esté conectada a la red eléctrica, como tampoco debe enchufarse mientras se encuentre en el embalaje.
Si alguna de las luces tiene malas conexiones o cables deshilachados o pelados, lo mejor es devolverla al establecimiento. No debe conectarse eléctricamente una guirnalda a otra si no están previstas para ello.
Resulta necesario comprobar cada luz para ver si tienen malas conexiones o cables deshilachados o pelados, y si es así, lo mejor es devolverlas o tirarlas si son muy viejas.
No deben dejarse las luces encendidas durante todo el día o toda la noche ya que el calor de las lámparas o un cortocircuito pueden producir un incendio.
Para mayor protección contra un choque eléctrico, deben enchufarse las luces y adornos del exterior en circuitos protegidos con interruptor de toma de tierra.
Por último, Consumur recomienda apagar todas las luces al ir a dormir o salir de casa. También hay que sujetar bien las luces exteriores a los árboles, a las paredes de la casa, o a otros soportes con grapas con aislamiento, pero no usar ni clavos ni chinchetas.
Si (
No(
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