www.diariocritico.com
El Hundimiento

El Hundimiento

martes 18 de enero de 2011, 14:02h
“¿Pero tu qué propones?” Esa pregunta es siempre una manera eficaz de cerrar una conversación, de dejar de escuchar, de poner punto y final a un intercambio de argumentos. Uno parece obligado a tener soluciones para una situación complejísima con miles de personas implicadas. Yo no tengo ninguna respuesta, ninguna, pero creo que tengo alguna buena pregunta.

Leía hace poco esta reflexión acerca de las posibles soluciones a la tan traída y llevada Ley Sinde. Y la verdad es que en un intercambio de ideas (tengo demasiado a los caballos en mi cabeza) pensé cuántas veces los aficionados hemos jugado, y jugamos, a dar posibles soluciones y a encontrar la mágica fórmula, el elixir, por el cual convirtamos un deporte espectáculo marginal condenado a sobrevivir, en aquel que recreamos en nuestros mejores sueños, viendo pasar ganador a nuestro caballo (yegua) favorita y no queriendo despertar hasta verle otra vez delante de nuestros ojos, rodeado de niños ante una abarrotada tribuna y como antesala de un extraño individuo de chaqueta eterna, que porta una pancarta con el lema; Vivan los caballos.  

Hete aquí que en esa misma reflexión, el autor se imaginaba a los corajudos pensadores de la Ley Sinde, tal cual estaban los actores de “El Hundimiento, encerrados en un búnker, sin ver ni querer ver el afuera, delirando planes inaplicables para ganar la guerra, atados unos a otros por fidelidades torpes, muertos de miedo porque el fin se acerca, viendo enemigos y traidores por todos lados, sin atreverse a cuestionar las ideas que les arrastran al abismo, temerosos de los bárbaros que están a punto de llegar”. Y otra vez que mi cabeza se trasladaba a imaginarme a los actuales gestores del turf en España en esa misma tesitura. Y mi pregunta no podía ser otra. ¿Quiénes son los bárbaros? ¿Quién tiene el poder?  

Es obvio que a día de hoy el futuro de las carreras de caballos pasa por un acuerdo de colaboración entre dos entidades que viven su particular “Hundimiento”. Sin salir de su bunker y sin querer ver lo que hay afuera.  

Y lo que hay en el exterior son noticias que agravan aún más el pesimismo instalado en cuanto al futuro de las carreras de caballos. Que los veterinarios oficiales de la SFCCE denuncien públicamente que no pueden realizar libremente su labor en el Hipódromo de la Zarzuela es muy grave y deja en pésimo lugar a los responsables del recinto madrileño. Pero eso puede ser sólo la punta de un iceberg. En los próximos días se deberá aprobar el programa de carreras para la primavera 2011 y el estado de “Hundimiento” es tal que me temo lo peor. 

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios