"Pérez Jiménez es el mejor presidente"

Que Hugo Chávez confiese sin remilgos que Marcos Pérez Jiménez "es el mejor presidente que tuvo Venezuela" no debe resultarle extraño a nadie. Que recién salido de la cárcel lo visitara en su mansión madrileña de La Moraleja, donde fue acogido por el Generalísimo Francisco Franco, tampoco. Mucho menos que lo invitara a su toma de posesión (Pérez Jiménez no quiso venir, quizás para evitar un encuentro incómodo con Luis Miquilena o los comunistas, torturados por él y agrupados alrededor de Chávez) o decretara duelo nacional cuando el dictador murió en septiembre de 2001.

Al fin y al cabo, ambos comparten el mérito de haber llegado al poder por obra de sendos golpes de Estado (Chávez de manera indirecta), los dos pasaron por la Academia Militar, los une el odio por los gobiernos (civiles) de la democracia representativa y sus dirigentes y sus administraciones (de corte militar) se asemejan en rasgos como la propensión a violar derechos humanos, liquidar medios de comunicación, encarcelar a adversarios políticos y meter la mano en los fondos públicos. ¿No resulta, acaso, un común denominador de los regímenes encarnados por ambos próceres un objeto tan ordinario como la maleta? Quiero decir, ¿la que repleta de dólares para Cristina Kirchner ordenaron remitir desde Miraflores y aquella, quizás mejor provista y de mayores dimensiones, que el hijo ilustre de Michelena olvidó en La Carlota, con aviones y avionetas de por medio?

Pues bien, todo esto se comprende y habrá quien tenga argumentos para refutarlo. Pero lo indiscutible y lo insólito es que luego de esas demostraciones de admiración y emulación hacia Pérez Jiménez el partido del cual Chávez es presidente organice una manifestación para conmemorar el 23 de enero, fecha en la cual, Nicolás Maduro dixit, "el pueblo derrocó la dictadura". Si MPJ es "el mejor presidente", si fue invitado por Chávez para su toma de posesión y el Gobierno no ocultó su consternación ante su deceso, ¿cómo entonces puede celebrar la caída del tirano a quien Chávez venera de forma abierta, pública y notoria?

Claro, lo de Pérez Jiménez fue una dictadura militar típica latinoamericana, con rasgos de eficiencia y obra tangible, que actuaba dentro de ciertos límites autoimpuestos. Lo de Chávez es un proyecto totalitario que no termina de cuajar porque el corsé democrático que le impuso su llegada al poder por la vía electoral se lo impide. Además, cuando enumera las obras de Pérez Jiménez (Fuerte Tiuna, Los Próceres, el Círculo Militar, la UCV, el 23 de Enero, el Teleférico, la Siderúrgica) lo hace porque su contabilidad en la materia es tan pobre que debe apoyarse en su modelo de derecha para justificar lo que no pudo, ni supo, ni quiso hacer desde la izquierda.

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